El presidente del Instituto Provincial de Bienestar Social (IPBS), Francisco Ángel Sánchez, y el delegado de Recursos Humanos de la Diputación de Córdoba, Esteban Morales, han presidido este jueves el acto de reconocimiento al personal de la residencia de gravemente afectados Santa María de la Merced, ubicada en Alcolea, con motivo del Día Mundial de las Personas con Discapacidad. El acto, que ha contado también con la presencia del director del centro, Jesús de Miguel, y con una representación de las familias de las personas usuarias, ha servido para reconocer el trabajo realizado por el personal de la institución, “una labor que es fundamental para no dejar a nadie atrás”.

Así se ha expresado el presidente del IPBS, quien ha agradecido “el trabajo que hace esta gran familia de Alcolea", de la que ha dicho sentirse "orgulloso de formar parte”. De igual modo, Sánchez ha remarcado que “toda la Diputación está volcada en el centro y, por ello, los próximos presupuestos recogerán el refuerzo presupuestario que requiere para realizar su actividad con las garantías que exige la pandemia”.

El diputado provincial ha hecho hincapié en que “el fin de la sociedad debe ser construir un mundo post covid desde la inclusión, por, para y con las personas con discapacidad”.

Por su parte, Esteban Morales ha destacado que el objetivo del gobierno de la Diputación seguirá siendo “poner a las personas en el centro, especialmente en momentos difíciles como los actuales, garantizado recursos para el mantenimiento de la actividad en los próximos ejercicios”.

La presidenta de la Asociación de Padres y Madres, Pepi Calero, ha intervenido en nombre de las familias de las personas usuarias para subrayar “la evolución y mejora que han tenido las instalaciones, así como el esmero y cuidado de sus profesionales”. Asimismo, ha agradecido tanto a la corporación provincial como a la dirección del centro el trabajo realizado durante la pandemia. Finalmente, el director del centro, Jesús de Miguel, ha destacado que el equipo profesional del centro ha estado “al cuidado de las personas que más lo necesitaban durante la emergencia sanitaria, en primera línea, para garantizar su bienestar pese a los riesgos”. Además, ha lanzado a los trabajadores y trabajadoras un mensaje de ánimo, porque “estamos viendo la luz al final del túnel, pero no podemos bajar la guardia”.

Tras las intervenciones de los responsables institucionales ha tenido lugar la entrega de reconocimientos al personal que ha trabajado durante el año para garantizar el bienestar de las personas con discapacidad. En esta ocasión, han sido reconocidos 34 trabajadores y trabajadoras de la institución.