Familias contra "el colapso" del centro de salud 2 de Lucena: exigen el retorno del pediatra

Nueve meses de persistencia de la vacante de la única pediatra especialista en el centro de salud 2 de Lucena desespera y abruma a numerosas familias. Un déficit acentuado, en los últimos días, por la baja médica de otra facultativa adscrita al área de atención a los niños. Como consecuencia, del cupo ordinario de tres médicos alistados en Pediatría en esta instalación sanitaria, en estos momentos, sólo continúa operativo un médico.

Las reclamaciones individuales que se han sucedido desde el trimestre final del pasado año han precedido a una movilización con recogida de firmas, con más de 1.200 apoyos a esta causa hasta el momento, y una concentración, en la puerta del edificio de la avenida de Santa Teresa, desarrollada a primera hora de este lunes.

Las familias que han acudido a la convocatoria pública –protagonizada, sobre todo, por madres- han descrito un panorama diario de “desbordamiento” y “colapso” a pesar de que la doctora que permanece en la plantilla de Pediatría “atiende incluso fuera de su horario de trabajo”.

La reducción del personal sanitario ha desembocado, entre otros episodios relatados en la acción reivindicativa, a la reubicación de menores en el centro de salud 1 –a unos 20 minutos de esta zona este del municipio- y en el cambio constante de los médicos que reciben a los menores ya que, usualmente, galenos de Medicina General del recinto ambulatorio del Paseo de Rojas suplen las deficiencias en las otras dependencias de Atención Primaria. Hermanos de una misma familia, han advertido los testimonios verbalizados esta mañana, han sido separados en centros de salud diferentes.

“Vamos a peor”, ha sintetizado, explícitamente, Fani Páez, la madre de un hijo de 11 meses que ha promovido esta movilización. Califica como “una barbaridad” el “nivel de atención” que brinda la Junta en el municipio porque “estamos hablando de niños”.

Algunas familias terminan abocadas a “la automedicación” o a recurrir a Urgencias, donde la asistencia “es puntual”, ignorándose un seguimiento homogéneo, que consideran crucial para sus hijos, analizado por el mismo pediatra. En otros casos, acaban optando por los seguros privados, una opción que rechaza Fani Páez ya que “no nos queremos ver en esa situación, hay quien no puede”.

Frente a los 0,88 días, de promedio, en la demora clínica cuantificado por la delegación territorial de Salud y Familias, este colectivo de madres demuestra, al acceder a la aplicación de Salud Responde que las agendas de cita aparecen “cerradas durante 14 días” sin oportunidad de comunicación “presencial ni telefónica”.

Otra de las madres intervinientes, añade otra causa que, a su juicio, origina estas tensiones sanitarias. “Sin unas condiciones laborales dignas”, opina Marta Pino, las pediatras “se van” porque, ante las plazas sin cubrir y las bajas médicas, “a la que se ha quedado le han quitado las vacaciones en Navidad”.

Tampoco aceptan otra de las explicaciones de la propia delegación territorial de Salud, sobre la incorporación, a las labores pediátricas, de facultativos de Medicina General y lamentan, al saber que al SAS le resulta imposible contratar a más médicos porque las bolsas de empleo están vacías, que “a la pediatra que había la trasladaron y ella no quería irse”.

Azucena Aranda ha narrado que ha convivido “con su hijo bastante malo, dos semanas y con fiebres altas” sin obtener ninguna cita. La Plataforma Lucena por sus Necesidades Sanitarias y, en segundo plano, el portavoz de Vox en Lucena, Antonio Hidalgo, han acudido a esta convocatoria en las escaleras principales del centro de salud 2 de Lucena.