La parroquia de San Mateo de Monturque, ubicada en la parte más alta del municipio de la Campiña Sur, junto al cementerio que guarda las cisternas romanas, será declarada Bien de Interés Cultural (BIC). La comisión provincial de Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía acaba de dar el visto bueno a esta propuesta al apreciar "los valores específicamente monumentales, artísticos y culturales" de este templo, que empezó a levantarse en los últimos años del siglo XV. El expediente concluye que tanto la construcción en sí como las obras de arte que atesora "merecen una protección singular".

La alcaldesa monturqueña, Teresa Romero (PSOE), ha recordado que una de las apuestas del área de Cultura del Ayuntamiento "siempre ha sido la puesta en valor del rico patrimonio" de la localidad, por lo que desde el año 2018 se ha trabajado en un expediente para el reconocimiento de la parroquia de San Mateo, principal templo de la localidad, como BIC. Ahora, la iglesia se incluirá en el Catálogo General de Patrimonio Histórico Andaluz con la categoría de monumento.

Monturque ya posee dos sitios históricos que cuentan con este reconocimiento. Se trata del torreón del castillo y de las cisternas romanas, ubicadas en el subsuelo del cementerio. "Es algo muy positivo para nuestro pueblo y para su potencial turístico", ha expresado la regidora en su perfil de la red social Facebook.

Ubicada en el paseo homónimo, la parroquia de San Mateo corona el municipio, de 1.900 habitantes. De estilo gótico-mudéjar, su construcción se remonta a los últimos años del siglo XV o primeros del XVI, aunque su fachada fue modificada a principios del XX.

Fachada de San Mateo.

El interior se compone de tres naves paralelas separadas por pilares de cantería ochavados, con cuatro arcos apuntados en cada línea divisoria. La nave central presenta en su bóveda el artesonado de madera original. Al fondo de la misma se encuentra el retablo del altar mayor del siglo XVII, en cuya parte superior se encuentra una imagen del titular de la parroquia y en la parte central la imagen de la Virgen de la Aurora, la patrona.

La parte más interesante es la suntuosa capilla del Sagrario en la cabecera de la nave del Evangelio, cuya construcción corresponde a la primera mitad del siglo XVII. Está concebido como un doble espacio profusamente decorado con relieves y esculturas de yeso, entre las que destaca la Santa Cena sobre la portada y las imágenes de San Juan Bautista y San Sebastián a ambos lados de la misma. La portada se compone de mármoles rojos y negros y se cierra con unas hermosas puertas de madera tallada.

También merece destacarse el retablo pictórico de la Inmaculada y la capilla de Jesús Nazareno, cuya imagen, de gran valor artístico, ha sido atribuida al escultor granadino Bernardo de Mora y fechado en el año 1662. Otras imágenes de interés son el Cristo de la Paz, de origen mexicano, realizado a principios del siglo XVII; la Virgen de la Soledad, de finales del mismo siglo, y San Isidro Labrador, de 1843.