El mesto de las Rozas ha vuelto al municipio de Montalbán después de 26 años en la Universidad de Córdoba (UCO). Este híbrido entre alcornoque y encina era un árbol centenario situado en el pago de Las Rozas, a 7 kilómetros de Montalbán, del que los investigadores de la UCO tomaron una sección en 1995, año en el que el mesto se derrumbó.

Este martes, en el Rectorado de la Universidad de Córdoba, ha tenido lugar el acto de entrega de la sección del árbol al que han asistido el alcalde de Montalbán, Miguel Ruz (IU); el rector de la UCO, José Carlos Gómez Villamandos, y el catedrático de Arqueología José Clemente Martín de la Cruz. Este profesor fue el investigador que solicitó al Ayuntamiento de Montalbán cortar una parte del tronco del mesto para estudiar sus anillos.

El 5 de agosto de 1995 el árbol de Las Rozas se desplomó en una lluvia de verano, pero se vino abajo porque personas de la zona hacían hogueras en las oquedades del tronco que contribuyeron al debilitamiento y, finalmente, enfermedad de este árbol centenario.

Cuando se derrumbó, el profesor Clemente, que por aquel entonces acababa de llegar a la Universidad de Córdoba, escribió una carta al Consistorio montalbeño y pidió cortar dos secciones del árbol. Debido a la consistencia y dureza del mesto, mezcla de encina y alcornoque, se trasladó al Centro de Capacitación y Experimentación Forestal de Cazorla que era el único lugar de la zona con sierras capaces de cortarlo con precisión. 

De ahí, se trasladó al laboratorio de investigación de los profesores José Clemente Martín de la Cruz y José Luis Úbera, que trabajaron juntos en el estudio del nacimiento y muerte del árbol. En el laboratorio, la sección del mesto recibió distintos tratamientos para su conservación y, así, se evitó que se deteriorara por los insectos y los hongos.

En el acto de entrega de ahora, Clemente ha recordado la importancia de investigar la biología de estos árboles para que los estudiantes puedan conocer la dendrocronología, la ciencia que estudia los anillos de los árboles. Gracias a estos anillos se pueden conocer datos meteorológicos, como períodos de sequía, de épocas en las que no hay registros ni datos.

El profesor ha afirmado que el estudio del mesto de Rozas "ha permitido hacer una previsión meteorológica anterior a 1894, año en el que empiezan a haber datos, gracias a la pauta de funcionamiento del árbol". Debido a que el árbol tenía más de 200 años, los investigadores de la UCO han podido estimar las precipitaciones en Montalbán desde el año 1805.

Por su parte, Úbera ha destacado que "el alcornoque era muy difícil que creciera en el entorno de Montalbán por lo que el mesto, probablemente, se formó porque un alcornoque sevillano polinizó una encina montalbeña".

El alcalde de Montalbán ha hablado de que en la base del antiguo mesto "está creciendo un retoño de varios metros verde y frondoso". Finalmente, ha añadido que la sección devuelta al Ayuntamiento "estará expuesta en un lugar público para que los niños conozcan una parte importante del pueblo de Montalbán".