La joven de 26 años que el domingo por la tarde murió en el Hospital Universitario Reina Sofía por las heridas con arma blanca propinadas supuestamente en Montemayor por su pareja, que se encuentra en paradero desconocido, pidió ayuda en la tarde del sábado al verse en peligro. Según han relatado varios testigos a el Día, la víctima, de nacionalidad rumana y que residía desde hacía una semana en la casilla de Mingohijo, a las afueras del municipio, se personó en la tarde del sábado en una vivienda cercana donde varias familias estaban reunidas y pidió auxilio.

"Me quieren matar", advirtió la chica a este grupo de personas, una de las cuales describe que la víctima se encontraba "muy nerviosa" y que presentaba moratones en algunas zonas de la piel. Tras calmarla, los testigos la ayudaron a que contactara con un familiar que también reside en España y, pese a la insistencia para que denunciara la situación, se marchó. Un rato más tarde, regresó con una advertencia similar, pero tampoco lograron retenerla.

Al filo de las 02:00, los testigos describen el paso de ambulancias y vehículos policiales en dirección a la casilla donde la víctima y el agresor, de nacionalidad rumana, residían junto a un grupo de compatriotas.

La brutal agresión sucedió tras una discusión de la pareja en la casilla, situada en las afueras de la localidad, a 34 kilómetros de Córdoba en dirección a Málaga. Víctima y agresor, de 30 años, se montaron en un coche y después, sobre las 01:50, según la Guardia Civil, el sospechoso del crimen dejó a la joven herida mortalmente en la puerta del alojamiento.

En un primer momento, fue evacuada al Hospital Comarcal de Montilla, el centro hospitalario más cercano, y, más tarde, ante la gravedad de las heridas, fue trasladada al Hospital Universitario Reina Sofía, en Córdoba, donde falleció sobre las 16:00 de este domingo.

El hombre huyó tras abandonar a su pareja en el mismo vehículo en el que se habían supuestamente desarrollado los hechos y está siendo buscado por la Guardia Civil.

La pareja había viajado junto a unos primos de la mujer y no se conoce que tengan hijos. Estaban integrados en un grupo de unos diez o doce temporeros rumanos que rotan en las múltiples explotaciones de ajo que existen en la zona, tanto en Montemayor como en otros municipios como Santaella o Montalbán.

La Subdelegación del Gobierno en Córdoba ha anunciado que los hechos se investigan como violencia machista a expensas del desarrollo de las investigaciones. De confirmarse esta tesis, la joven asesinada sería la víctima número 15 este año, la segunda en Andalucía. Desde el 1 de enero de 2003 se han registrado 1.145 mujeres asesinadas por violencia machista tras este crimen.