Galgos del Sur ha denunciado el abandono de un podenco de caza con una pata arrancada por un cepo y atada a la cancela de una de las voluntarias de la protectora de animales Amigospatas, en el municipio de El Viso, en la comarca de Los Pedroches.

Según la información facilitada por Galgos del Sur, al descubrir el estado en el que se encontraba el animal, al que llaman Timi, lo trasladaron de urgencia a una clínica veterinaria en Añora, donde recibió la primera atención veterinaria. A continuación, la entidad de protección animal Galgos del Su se hizo cargo del podenco y lo trasladó al Hospital Veterinario de Córdoba, donde se encuentra ingresado.

La presidenta de Galgos del Sur, Patricia Almansa, ha explicado que Timi "llevaría unas dos semanas con la pata arrancada de cuajo por un cepo hasta que su dueño o alguien que lo encontrara decidió dejarlo en la puerta de una de las voluntarias de Amigospatas, con la clara intención de no delatarse para no ser denunciado".

Según Almansa, antes de operar a Timi de la pata es necesario bajar la infección, por lo que su intervención quirúrgica tendrá que esperar.

Este es el segundo suceso relacionado con la caza que tiene lugar en El Viso en menos de un año, según esta entidad, que ha recordado que el pasado mes de julio otro perra que estaba dada en acogida a una familia de El Viso por la protectora Amigospatas, se escapó de su domicilio y apareció horas después con una pata destrozada y con perdigones por toda esta de un disparo con una escopeta de caza, tuvieron que amputarle la pata.

Desde Galgos del Sur, a pesar de la denuncia interpuesta por el Partido Animalista Pacma por este caso, han señalado que no tienen constancia de que la Guardia Civil haya encontrado al culpable y han subrayado que junto a estos sucesos con perros, tienen conocimiento de que en los cotos del término municipal de El Viso existen una gran cantidad de cepos para la caza furtiva, siendo estos ilegales.

Desde Galgos del Sur, que presentarán una denuncia por lo sucedido a Timi, han instado al Seprona de la Guardia Civil que "persigan con contundencia la colocación de trampas ilegales para cazar, las irregularidades que se producen durante la caza, y el maltrato al que son sometidos los perros de los cazadores y rehaleros manteniéndolos en condiciones lamentables".