Los empleados de la obra precintada reclaman una solución al Consistorio

Los trabajadores de la constructora El Ochavo, encargada de las obras precintadas el pasado 7 de julio debido a que su situación impiden la alineación del Paseo Marcos Redondo de la ciudad vallesana, protagonizaron ayer a las puertas del Ayuntamiento nuevas movilizaciones. El motivo de esta actuación es conseguir una respuesta a la situación de paro que viven desde que el actual alcalde, Baldomero García, ordenara paralizar las obras y el precinto de las mismas. Además, aprovecharon la convocatoria de prensa realizada por el alcalde para explicar los motivos de esta medida, y así conseguir "que escuchen nuestras peticiones y nuestro total rechazo a esta medida".

El encargado de la obra, Juan de Dios Fernández, explicó ayer a El Día que el actual regidor en ningún momento ha respetado a los 17 trabajadores a los que ha afectado de forma directa el precinto, así como a los perjudicados de forma indirecta como electricistas, fontaneros o las empresas de materiales. Además, criticó que llevó a cabo la paralización de las obras sin esperar la resolución judicial, "lo que muestra que todo lo ha hecho por no recibir más presiones de la gente que le apoyó para obtener la Alcaldía y a los que le prometió que paralizaría las obras". Incluso, Fernández aseguró que en la reunión que mantuvieron con el alcalde el pasado martes para pedirle una solución a su situación, ya que muchos algunos de ellos no tienen derechos a desempleo, éste les dijo que no disponía de "una varita mágica" para acabar con sus problemas. Además, aseveró que la única vía que Baldomero García les ofreció fue que los que pudieran, se acogiera al paro. Por todo ello, considera que están en todo su derecho de reivindicar una alternativa a las puertas del Consistorio, "algo que llevaremos a cabo diariamente hasta que no se nos plantee una solución", aseguró Fernández. Incluso, tienen previsto una gran movilización el próximo día 20 si en esa fecha sigue la situación igual que en la actualidad. "Estamos investigando los cauces que hay que seguir para convocar legalmente la manifestación, y si todo continúa igual así lo haremos", aseveró.

El alcalde de Pozoblanco quiso aclarar ayer la situación que se vive en la localidad vallesana, aunque de fondo tuvo que soportar durante toda la rueda de prensa los pitidos y quejas de los albañiles afectados. Baldomero García aclaró, acompañado por tres de los concejales del gobierno -en concreto, Manuel Cabrera, Emiliano Pozuelo y Bernardo Ruiz- que se tardó un mes, desde que se emitió el decreto, en precintar la obra para dar tiempo a la empresa "a que recapacitase". Sobre todo, aseguró que lo que más le preocupa al equipo de gobierno es la situación de los trabajadores, y que está abierto en recibirlos en cualquier momento, como ocurrió el martes. En esta cita, el alcalde afirmó que se le preguntó a los trabajadores por su situación y que propuso a todos aquellos que se quedaran en desamparo que se personaran en el Ayuntamiento para ayudarles. El alcalde no puso ningún impedimento a que los empleados de la constructora lleven a cabo movilizaciones y que no se paralizará ninguna actuación siempre que se siga el cauce legal.