La duquesa de Alba bautiza a dos burros en la sede de Adebo

La duquesa de Alba, Cayetana Fitz-James Stuart, bautizó ayer con anís en Rute a dos burros a los que le ha puesto el nombre de Pepín y Rosa, que tienen cuatro y cinco meses de vida respectivamente. La duquesa acudió a las instalaciones de la Asociación para la Defensa del Burro (Adebo) en la localidad ruteña, en la comarca de la Subbética, donde bautizó a los dos animales, de los cuales Rosa fue amadrinada por ella misma, mientras que a Pepín la amadrinó su hija Eugenia Martínez de Irujo, que no asistió al acto. El ritual presidido por la duquesa comenzó con la lectura en voz alta de todos los asistentes de una manifiesto en defensa del burro y posteriormente procedió a verter unas gotas de anís sobre las cabezas de los asnos.

Cayetana Fitz-James Stuart, que previamente visitó el Museo del Chocolate de Rute donde hay una escultura suya, se mostró orgullosa de bautizar a Pepín y Rosa e incluso se animó a bromear con una cabra que no se despegaba de ella. La duquesa informó de que Rosa será trasladada dentro de un mes a la finca que la Casa de Alba tiene en La Carlota, mientras que Pepín irá a la finca que su hija tiene en Sevilla.

El fundador de Adebo, Pascual Rovira, detalló que la burra Rosa es hija de Camila, bautizada en su día por el escritor Camilo José Cela, y de Siete Soles, apadrinado por otro Premio Nobel de Literatura, José Saramago. Pepín es hijo de Arriera, la burra bautizada en 1998 por el periodista Tico Medina y de Califa, que fue apadrinado por el escritor Antonio Gala.

Rovira avanzó que la siguiente personalidad en apadrinar un asno será el cantaor flamenco Manuel Gerena que se sumará así a una larga lista de nombres entre los que se encuentran algunos tan relevantes como la reina Sofía que bautizó a Lluvia en 2008.

Pascual Rovira preside desde hace años este colectivo de defensa del borrico y cuenta para ello con unas instalaciones en la Sierra de Rute. Además, Adebo fue noticia hace algo más de un año después de que una mujer de Telde, en Canarias, dejara parte de sus posesiones a distintas entidades de defensa de los animales, como es la entidad de Rovira.