La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, visitó este pasado lunes el Colegio Público de Infantil y Primaria (CEIP) Carmen de Burgos, en su localidad natal de Cabra, donde presidió los actos centrales de la conmemoración del 50 aniversario de este centro educativo. Allí fue recibida por la subdelegada, Rafaela Valenzuela, el alcalde de Cabra, Fernando Priego, y representantes de la cúpula educativa de la Junta de Andalucía en la provincia de Córdoba.

Tras la pertinente recepción, Calvo se dirigió a la biblioteca del colegio donde, sobre un pupitre, plasmó su rúbrica en el libro del honor del centro y entregó como obsequio al director, Jesús Gómez, varios ejemplares de la Constitución Española adaptados a los diferentes niveles educativos del alumnado. Desde ediciones con ilustraciones comprensibles para los más pequeños hasta lujoso volumen que quedará como recuerdo para la Dirección de esta institución educativa.

“El de hoy es un acto solemne”, consideró la vicepresidenta en funciones, quien agradeció al claustro la invitación cursada para “poder hablar con los niños y niñas lo que representa la Constitución, la democracia, la paz, la convivencia, las libertades y los derechos que tenemos como ciudadanos de un país” como España. Calvo confesó sentirse “emocionada” por este encuentro en el que se unieron dos factores, por un lado el hecho de encontrarse en su pueblo, y de otra parte “cumplir con la gran obligación de la política” de “ayudar a nuestros mayores y proteger a nuestros menores”.

Para cerrar esa “mañana reconfortante, personal y políticamente”, como afirmó, desde el centro se le invitó a descubrir una placa conmemorativa de esta efemérides en la que figura su nombre como autoridad invitada. “Sólo tengo placas con mi nombre en mi instituto –el Aguilar y Eslava de Cabra– y ahora en el colegio de mi barrio”, dijo.