Unidos contra los apagones en Fuente Palmera: "El temor a un nuevo corte es continuo. Llevamos diez en un año"

Ha habido heladerías que han perdido el género, bares que han tenido que deshacerse de carnes y embutidos, comercios que se han visto obligados a cerrar antes de tiempo, velatorios celebrados con la ayuda de grupos electrógenos y ancianos de residencias que han pasado la noche en el centro de salud.

Pero lo que realmente lo cambió todo fue una llamada a vida o muerte: "Estábamos en pleno apagón, esperando una explicación por parte de la compañía, cuando llamó un vecino para alertar de que su padre, recién operado de un pulmón, se quedaba sin batería en el respirador. Era cuestión de minutos que aquello pasara, y entonces fuimos conscientes de que esta situación es mucho más seria que perder la comida de un congelador o de que un bar tenga que cerrar antes".

Quien habla es Javier Moyano, gerente de Cash Moyano, uno de los muchos vecinos de Fuente Palmera que, desde hace meses, años, sufre las caídas habituales del suministro eléctrico en el municipio. Algunos duran apenas unos minutos y se consideran microcortes, pero otros se prolongan durante horas. El último importante, el pasado 17 de junio, fue de cuatro horas y media, en plena ola de calor y con un aviso naranja de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), una situación habitual a la que se vive ahora.

"Debemos ir unidos"

"Esa llamada me marcó mucho, a mí y a todo el pueblo. Y nos hizo ser conscientes de que debemos ir unidos, y de que las pérdidas materiales no son nada comparadas con esa situación extrema", explica Moyano. En su supermercado, por suerte, las cámaras aguantaron y la cadena del frío no se rompió.

En el último año, calcula el Ayuntamiento de la Colonia, ha habido una decena de cortes de luz que han afectado a unos 6.000 vecinos. La más grave fue en octubre y se prolongó más de 24 horas, con la incertidumbre, el estrés y la indefensión que ello provoca: "Nunca sabes cuánto puede durar un corte. Hay empresas que han comprado generadores, pero otras no pueden asumir el gasto y solo les queda esperar", lamenta el presidente de la Asociación Empresarial de Fuente Palmera (AEFP), Manuel Jesús Adame, quien no comprende cómo esta situación lleva arrastrándose décadas sin que no se le haya dado una solución definitiva.

De fondo, la compleja situación del suministro eléctrico en un municipio ya de por sí difícil de gestionar, dividido entre el núcleo principal y ocho aldeas donde residen en total cerca de 10.000 personas. Endesa es la suministradora, y la compañía local Herederos de Emilio Gamero es la distribuidora. A la madeja se suman más de medio centenar de transformadores particulares en cortijos, casas de campo o fábricas, algunos de ellos sin las revisiones pertinentes al día, así como instalaciones solares de autoconsumo que vierten o no a la red según el momento, con bajadas y subidas continuas de la tensión.

"Hemos ejercido mucha presión, sobre todo desde el corte de octubre. Hemos recogido firmas y nos hemos reunido con el delegado de Industria de la Junta de Andalucía en Córdoba, Agustín López, que está mediando con las compañías", agradece el presidente de la patronal, esperanzado por que la nueva línea eléctrica comprometida, procedente de Écija, llegue lo antes posible. Mientras tanto, "seguiremos improvisando soluciones, reuniéndonos y ejerciendo presión", avisa.

"El seguro hizo caso omiso"

Las reuniones y las llamadas para gestionar este asunto son continuas, lo que no evita que, ante un nuevo corte, cundan las mismas sensaciones: desamparo, desprotección, abandono... Al tiempo, las reclamaciones a las aseguradoras se acumulan, aunque no siempre con los resultados esperados.

"En nuestro caso, el seguro hizo caso omiso a la reclamación, como quien oye llover", se queja una de las damnificadas, Susana Álvarez Soler, responsable de la cafetería confitería Hermanos Soler. En una mañana de agosto, en plena ola de calor, decenas de personas llenan la terraza de este céntrico establecimiento. Las tostadas y los cafés vuelan desde la barra del local, una actividad que por la tarde continúa con helados, refrescos y cervezas.

Eran cerca de las 21:00, hora punta, con el servicio hasta arriba aquel día de junio de alerta naranja -como estos días de agosto-, cuando la luz se fue: "Al cabo de una hora, la gente empezó a levantarse. La cerveza salía caliente y perdimos los helados y el fiambre de los desayunos, en total más de 600 euros. El seguro no se ha hecho cargo porque argumenta que es responsabilidad de Endesa", lamenta impotente la empresaria.

El fallo que provocó esta última caída prolongada se identificó en un transformador de alta tensión de 66 kV situado en la zona de Posadas, que afectó a la línea Fuente Palmera 1. Este fallo provocó un corte generalizado de suministro en Fuente Palmera y el resto de núcleos de la Colonia. Según los responsables técnicos, el sistema de protección activó una alarma de tierra resistente, lo que generó el corte automático de la línea por seguridad.

"Necesitamos un plan de inversiones real"

Fuente Palmera, con el caserío desparramado en un llano de la Vega del Guadalquivir, sufre uno de los veranos más rigurosos de España, con temperaturas a menudo por encima de los 40 grados centígrados. Así que el consumo eléctrico se dispara en plena canícula, y el recelo por lo que pueda ocurrir llena las conversaciones.

"El temor es continuo. Esta zona tiene un déficit importante de suministros básicos, como las propias administraciones reconocen. Y necesitamos un plan de inversiones real", reclama el alcalde de la Colonia, Francisco Javier Ruiz (IU), quien considera que la responsabilidad es compartida entre la Junta de Andalucía (en materia de inspecciones de las líneas) y el Gobierno central (tiene que dotar de mayor capacidad eléctrica a la comarca).

Los cortes de luz en la Colonia, de hecho, han llegado al Congreso de los Diputados por boca del portavoz de Sumar, Enrique Santiago, que consideró "inadmisible que Fuente Palmera tenga que soportar un corte de luz por tantas horas, cuando desde el Consistorio se llevan años demandando la realización por parte de E-Distribución (Endesa) de obras de mejora, ampliación o renovación de la red de baja tensión del municipio".

Tres proyectos de mejora sobre la mesa

A mediados de julio, se produjo una reunión entre el Ayuntamiento, la Asociación Empresarial y el delegado de Industria de la Junta de Andalucía en Córdoba, Agustín López, que en la Colonia confían que sea un punto de inflexión. Durante el encuentro, los representantes del Ejecutivo autonómico informaron de que actualmente existe un "mayor entendimiento y coordinación" entre las empresas responsables del suministro y la distribución eléctrica, lo que ha permitido "establecer líneas de trabajo" concretas para abordar la situación.

En este sentido, se confirmó el compromiso de revisar las líneas eléctricas afectadas, así como la situación técnica de los transformadores existentes a lo largo de la línea de distribución. En concreto, se está procediendo a analizar de forma individualizada cada instalación, con sanciones para aquellas que no cumplan con los requisitos que marca la normativa vigente. Asimismo, se anunció que en breve se llevará a cabo un cambio de línea que contribuirá a mejorar la estabilidad del suministro eléctrico.

También se informó de la existencia de tres proyectos de mejora de la red eléctrica incluidos en el plan de inversiones de la empresa distribuidora, uno de los cuales ya se encuentra en periodo de exposición pública. Por otro lado, se requirió a las compañías suministradoras a que cualquier corte programado de suministro sea notificado con antelación al Ayuntamiento, para que pueda ser trasladado a la ciudadanía y empresas afectadas, pues la falta de comunicación es una de las quejas principales.

"Es fundamental que las eléctricas entiendan que el suministro no puede fallar", incide el primer edil, quien advierte de que la localidad se mantiene "vigilante" para que los compromisos adquiridos se cumplan lo antes posible.