Salud

Jesús Aguirre llama a la calma sobre el virus del Nilo en Córdoba tras el nuevo mapa de riesgo

  • Córdoba cuenta con tres municipios identificados como zonas "predispuestas"

  • El consejero de Salud explica que se trata de un análisis que señala dónde tener más precaución de cara al verano

Imagen de mosquito.

Imagen de mosquito. / El Día

Aguilar de la Frontera, Lucena y Puente Genil han sido los tres municipios señalados en el mapa coloriométrico de la Junta de Andalucía como áreas "predispuestas" al virus de la fiebre del Nilo. Un hecho por el que, según el consejero de Salud de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, no hay que preocuparse por el momento, ya que, por ahora, el estudio es solo "un diagnóstico preventivo". 

"Son estudios epidemiológicos que se hacen cogiendo los datos que hemos tenido en años anteriores y miramos el índice colorimétrico de cada una de las áreas de Andalucía para saber dónde tenemos que tener más precaución de cara al verano que es cuando viene; ahora mismo no hay virus del Nilo", ha explicado Aguirre este viernes

La fiebre del Nilo Occidental es una enfermedad emergente en Europa y su declaración es obligatoria y urgente. Estos tres municipios cordobeses obtienen el nivel de riesgo 1; estos quiere decir que son lugares donde se dan las condiciones ecológicas "adecuadas" para la propagación de dicho virus.

La principal particularidad que compartes estas tres localidades, y como ha señalada el consejero, es que son zonas próximas a masas de agua. En Aguilar de la Frontera, se encuentra la laguna de Zóñar; en Lucena hay varios cauces, entre ellos el del río Anzur, y por Puente Genil circula el Genil y, además, en su término se encuentra el embalse de Cordobilla.

La Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Junta de Andalucía es la encargada de dividir la comunidad andaluza según el riesgo de atraer este virus. Los municipios, como los de la provincia cordobesa, que sean considerados como área predispuesta deben cumplir una serie de obligaciones para las administraciones.

Así, los ayuntamientos deben realizar diagnosis de la situación y, en caso necesario, elaborar un plan municipal que contemple las medidas de vigilancia y control de la población de mosquitos, y deben comunicar e informar a la ciudadanía de las medidas preventivas de saneamiento y ordenamiento del medio durante la temporada de mosquitos, de marzo a noviembre. En cuanto a la Junta, su papel es el del asesoramiento técnico y colaboración con la Administración local; verificación de actuaciones y vigilancia epidemiológica. Por último, se encarga de la vigilancia animal.

El área predispuesta equivale al nivel 1 de alerta; a continuación, se encuentra el nivel 2 de alerta, amarillo, equivalente a área de riesgo bajo; el nivel 3, naranja, de riesgo moderado; el 4, rojo, de riesgo grave; y el 5, violeta, área afectada. 

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