"Un acuerdo político es inalcanzable si actuamos como si jugáramos al rol"

Rafael Llamas (PSOE), arquitecto de profesión, afronta su primer mandato como alcalde de Montilla, el único municipio mayor de 20.000 habitantes de Córdoba gobernado en coalición. La culminación de la reforma de la Corredera, la apertura del Castillo, el impulso de la Ronda Norte o la promoción del enoturismo son algunos de sus retos.

-Sucede en la Alcaldía al popular Federico Cabello de Alba, ¿en qué situación se encontró el Ayuntamiento cuando llegó?

-Podemos diferenciar dos aspectos, el propio funcionamiento interno de la administración pública, como gran empresa que gestiona un municipio, y el proyecto político que cada equipo de gobierno tiene. Nos encontramos un Ayuntamiento con muchas carencias, sobre todo en su estructura interna. Por eso, como primera decisión, hemos reestructurado las áreas con la creación de una delegación exclusiva de servicios públicos, medio ambiente y obras públicas separada del urbanismo, que antes lo aglutinaba todo. Esto provocaba una gran carencia en todos los servicios públicos. Así hemos puesto la nueva semilla de lo que debe ser una administración local más directa y cercana. Respecto a la ciudad, no existía una dirección clara, no había una estrategia a seguir no ya sólo en los últimos cuatro años, sino a medio plazo. En definitiva, queremos mirar hacia adelante y no hacia el pasado. Hay muchas cosas por hacer.

-¿Qué retos se plantea para este mandato?

-Como ejercicio de transparencia con el ciudadano, todos los objetivos están recogidos en el documento programático que el PSOE e IU fijamos al inicio del mandato. Este acuerdo de gobierno, con sus retos y medidas, pone a los vecinos en el centro de la política.

-Montilla es el único municipio mayor de 20.000 habitantes de la provincia donde hay un gobierno de coalición. ¿Cómo es la relación con IU?

-La relación con IU es extraordinaria. Son, además, dos partidos que en Montilla tenían experiencia de gobierno. Cuando nos sentamos a analizar los resultados de las municipales, vimos que el Ayuntamiento dependía del consenso, así que dejamos atrás los intereses partidistas y situamos a los ciudadanos en el centro de la gestión.

-Usted ya ha pasado por una negociación como la que estos días está protagonizando su partido para alcanzar la Presidencia del Gobierno. ¿Algún pronóstico sobre lo que puede ocurrir?

-Como pasó en Montilla, tienen que sumarse voluntades, olvidarnos de asuntos partidistas y centrarse en los problemas de los ciudadanos. Valoro mucho el trabajo que está haciendo el candidato de mi partido, Pedro Sánchez, y me quedo con lo que comentó en su primer discurso de investidura, que todo pasa por que el PSOE sea protagonista. Hablamos de una legislatura de cambio en la que toca hacer grandes reformas en el Estado, y el PSOE se sitúa perfectamente entre lo que hay a su derecha y lo que hay a su izquierda.

-¿Es complicado llegar a un acuerdo de gobierno?

-Cuando se olvidan los intereses partidistas y se ponen a los vecinos en el centro, llegar a acuerdos es muy fácil. Lo que no se puede hacer es jugar como si España fuese una gran pantalla y estuviésemos en un juego de rol, como hay partidos que lo plantean, así es inalcanzable. Cuando se intenta negociar desde el odio, no avanzamos. Tenemos que ser muy optimistas y confiar en que nuestros dirigentes, que legítimamente han salido de las urnas, estarán a la altura de esa representación, llegarán a un acuerdo y pondrán en el centro a las personas.

-Montilla está volcada estos días en la celebración del IV centenario de la muerte del Inca Garcilaso, ¿qué va a suponer?

-Es un proyecto fundamental para Montilla y tenemos una oportunidad que no podemos dejar escapar. El Inca Garcilaso es un personaje de referencia en Iberoamérica y, de hecho, en Perú se considera el primer peruano. Tenemos la suerte de que vivió en Montilla durante 30 años y que no sólo tiene ese valor de mestizaje biológico, sino también cultural, por lo que lo convierte en un referente para todos los escritores hispanoamericanos. Como acto central, el 23 de abril tendremos la presencia del embajador de Perú y de otras autoridades. Será el día en que celebraremos el cuarto centenario de la muerte del Inca Garcilaso con muchísimas actividades, conferencias... La Cata del Vino Montilla-Moriles también girará en torno a esta persona.

-Desde el punto de vista de las infraestructuras, ¿cómo va a cambiar Montilla en los próximos cuatro años?

-Tenemos grandes proyectos, como la culminación de las obras de la Corredera e intentar seguir hasta la Puerta de Aguilar. También queremos reformar las naves de Ciatesa para que se conviertan en un espacio multifuncional y construir la pista de atletismo. Esta misma semana, el Pleno ha aprobado que se financie con los Planes Provinciales de la Diputación. Esta decisión ha supuesto subir el primer escalón de un proyecto muy ambicioso que ya, a priori, arranca como una carrera de obstáculos; trabajaremos para que al final sean superados. Y luego está la Ronda Norte como proyecto emblemático de Montilla. Estamos dando pasos para su ejecución. Son iniciativas de las que llevamos hablando años y siempre están encima de la mesa, pero no se comienzan. Estamos intentando ponerlas en marcha.

-Apunta a que las obras de la Corredera continuarán por la Puerta de Aguilar...

-Sí, nuestro objetivo a medio y a largo plazo es que las obras continúen hacia adelante, hacia la Puerta de Aguilar, para que el centro sea más accesible y más habitable. Debemos vivir en ciudades más humanizadas y no podemos tener calles de hace 40 años.

-¿Y la Corredera va a ser finalmente peatonal?

-Primero hay que conocer el problema que puede generar la peatonalización por la configuración urbanística que tiene el casco urbano, pues hay que garantizar la movilidad de peatones y vehículos. Hay que tomárselo con calma, sin adoptar decisiones, como se ha hecho años atrás, de las que haya que desdecirnos. Pero sí que el objetivo es trabajar por la peatonalización.

-¿Y para que sea completamente peatonal es imprescindible cerrar la Ronda Norte?

-La Ronda Norte no es un proyecto a corto plazo, así que no se puede adecuar la peatonalización a que se complete la Ronda Norte, un asunto que se ha discutido en campañas electorales y en el Pleno. Está infraestructura no está definida como sistema general, sino como obras parciales en cada una de las unidades de actuación que hay que desarrollar, y eso es un problema que viene derivado de nuestro propio Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Estamos en conversaciones con la Junta de Andalucía, que es la responsable de ejecutar el tramo que prolonga el que ya está en funcionamiento. Las negociaciones ya están muy avanzadas. Ya de hecho estamos hablando con los particulares para ver si podemos llegar a algún acuerdo urbanístico para que nos adelanten los terrenos y formalicemos un proyecto unitario. Este segundo tramo iría desde la calle Córdoba hasta Mateo Sánchez.

-¿Y por parte de la Junta de Andalucía hay algún compromiso?

-La Junta de Andalucía ya llegó a un convenio con todos los propietarios. Están los proyectos de reparcelación y urbanización, y el tramo estaba a punto de acometerse justo cuando nos vino la crisis, que afectó de manera tremenda al desarrollo inmobiliario. Es una actuación que no sólo consiste en la realización de la carretera, sino que genera nuevos suelos edificables en esa zona. Por lo tanto, el inconveniente principal no es tanto ejecutar el tramo de ronda, sino generar nuevos suelos. La tramitación urbanística y la documentación administrativa están hechas, lo que hace falta es trabajar para que exista una consignación presupuestaria y sea una realidad lo antes posible.

-¿Se verá durante el presente mandato algún avance?

-A nadie le debe caber duda de que este equipo de gobierno está trabajando de manera desmedida principalmente en este proyecto porque pensamos que es prioritario. Ojalá sea una realidad en este mandato.

-La apertura del Castillo del Gran Capitán como museo también está pendiente...

-El Castillo es una inversión económica muy importante que en los últimos años ha hecho el Ayuntamiento, y hace muy poco hemos acabado una actuación en la muralla. Ahora mismo tenemos pendiente cerrar una colaboración con el Museo del Ejército, en Toledo, para culminar la exposición permanente sobre el Gran Capitán que se ubicará en la planta alta del alhorí. Ahora estamos centrados en los actos del Inca Garcilaso y no nos gustaría que la inauguración de este espacio no tuviese la entidad suficiente. Pero en breve se abrirá el espacio museístico sobre el Gran Capitán; será una exposición muy didáctica y muy representativa de lo que esta figura supuso no sólo para Montilla, sino para la Historia de España.

-En años anteriores, el Ayuntamiento centró la oferta turística del municipio en la figura de San Juan de Ávila. ¿Qué resultados ha dado?

-La oferta turística de Montilla es muy variada. Se ha estado trabajando en el turismo religioso, pero para el municipio no ha tenido los resultados que todos esperábamos después de la inversión que se realizó. Lo que nos diferencia es nuestro vino. En este sentido, lamento que en estos cuatro años la Ruta del Vino no ha estado lo cuidada que tenía que haber estado, porque el vino es una fuente de riqueza. Ahora estamos volcados en este sector, potenciando actividades volcadas en el vino porque pensamos que el futuro turístico del municipio pasa de forma indudable por aquí. San Juan de Ávila, el Gran Capitán o el Inca Garcilaso también están presentes porque Montilla no es sólo vino, sino también cultura.

-Montilla lidera una ruta turística enológica por denominaciones de origen del Sur de España y Portugal, ¿qué perspectivas hay?

-Es un proyecto muy interesante que une rutas en torno al vino, con los extremos en Montilla y el Sur de Portugal y pasando por Málaga o Huelva. Tuvimos la oportunidad de presentarnos a esta subvención de fondos europeos; es una iniciativa muy ambiciosa liderada por Montilla y estamos pendientes de la resolución de la subvención.

-Da la sensación de que el sector del vino no termina de despegar en Montilla y de que falta conciencia sobre la riqueza que aportaría este producto...

-Tenemos que diferenciar dos aspectos muy importantes. Nuestras bodegas y cooperativas, que están exportando a todo el mundo, pero también hay que trabajar por que este vino se reconozca como el gran producto que es. El reto está en darle valor añadido y conseguir que el amontillado, el oloroso, o el palo cortado estén en cualquier vinacoteca o en cualquier supermercado de España.

-Uno de los principales puntos de fricción con la oposición durante estos meses ha sido la liberación de concejales. El PP asegura que el cogobierno sale a las arcas municipales más caro que su equipo, ¿se ha resuelto ya esta polémica?

-A quien perjudica este discurso es a todos los ciudadanos. En Montilla lo que hay son necesidades y tenemos que trabajar en muchas áreas. Los vecinos lo que quieren es que cuando pasen cuatro años haya un balance positivo de los proyectos que se prometieron en la campaña electoral. El discurso de las liberaciones de concejales es estéril y la oposición lo ha utilizado como excusa, quizás, para tapar otras deficiencias. Tenemos a personas muy comprometidas y muy preparadas. Y fruto de este trabajo son los presupuestos, que se han presentado en tiempo y forma, con más de 300.000 euros en disminución del gasto corriente. Las políticas sociales del Ayuntamiento se han multiplicado casi por dos gracias a la puesta en marcha de un plan de inclusión. Si queremos que el municipio avance y tenga mejores oportunidades, hay que contar con personas dedicadas a ello. Es muy significativo que después de que durante unos meses se haya mantenido el debate sobre los liberados, justo en el Pleno de febrero el PP designó también a su concejal liberado. Ha sido un asunto muy oportunista y muy recurrente por parte del principal partido de la oposición.

-Policías locales han denunciado por lo contencioso-administrativo al Ayuntamiento debido a que, según dicen, el equipo de gobierno no atiende sus reivindicaciones laborales. ¿Cómo se va a solucionar este conflicto?

-Cuando llegamos al Ayuntamiento, nos encontramos con este problema. Se ha alcanzado un acuerdo para la realización de cuadrantes y mantenemos un diálogo permanente con la Policía, por lo que el problema se está reconduciendo después de estar enquistado durante muchísimo tiempo. Se necesita consenso y voluntad por ambas las partes, y en eso estamos trabajando. Agradezco todo el esfuerzo que el delegado de Seguridad Ciudadana, Francisco García Zamora, está realizando. Respecto a las demandas, aún no nos ha llegado ninguna.

-¿Y se están atendiendo las reivindicaciones de los agentes?

-Claro que se están escuchando, y el diálogo es muy fluido. Algunas reivindicaciones son justas y en otras tal vez tienen que escuchar a las otras partes. Reconozco que el servicio que realiza la Policía es excepcional. No se puede decir que Montilla sea la ciudad más segura y con menos conflictos de España, pero seguro que está entre las mejores de sus características.

-El Gobierno central habla de mejoría económica, ¿la palpa en el municipio?

-Cada vez que el presidente de Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, habla de mejoría lo invitaría a que viniera a Montilla, se sentase conmigo en la Alcaldía y palpase la realidad de muchísimas personas que están desatendidas. Si el Gobierno se siente satisfecho por que un trabajador gane 650 euros, discrepo muchísimo. Una cosa son los datos macroeconómicos y otra muy diferente el día a día de las personas. Y en los ayuntamientos la falta de recursos nos impide llegar como administración más cercana a cubrir las necesidaes de los vecinos. A los alcaldes nos cuesta mucho trabajo explicarle a los ciudadanos estas afirmaciones porque muchas personas viven en una situación lamentable.

-El PSOE ha ganado en Córdoba todas las elecciones que se han celebrado en el último año. ¿A qué vincula este éxito?

-Muchos cordobeses se sienten identificados con un partido que está con los problemas diarios y que posee la capacidad de tomar decisiones. Un partido político no es un fin, sino un medio para mejorar la vida de las personas. Estos resultados, además, son fruto del trabajo de muchos militantes.

-En los últimos días se ha hablado mucho de la supresión de las diputaciones. ¿Está a favor de esta medida a la que se ha comprometido el líder de su partido?

-Montilla no sentiría tanto esta pérdida, pero sí son fundamentales para las localidades de menos de 20.000 habitantes. Este debate es precipitado y no creo que sea una de las medidas por las que haya que apostar de manera prioritaria. Que necesitan un reestructuración o una actualización, es evidente.