Los Pedroches

Villanueva de Córdoba despide a la Virgen de Luna

  • Cientos de fieles jarotes han vivido intensamente la romería en un ambiente de normalidad

Los jarotes portan a la Virgen de Luna camino de su santuario

Los jarotes portan a la Virgen de Luna camino de su santuario / Sánchez Ruiz

Cientos de fieles de Villanueva de Córdoba han vivido intensamente la despedida de la Virgen de Luna, en un ambiente de casi normalidad y que recordaba las romerías de antes de la pandemia. Portada a hombros, la Virgen de Luna ha salido de la parroquia de San Miguel a las ocho de la mañana, precedida por el patrón de Villanueva de Córdoba, San Miguel, que como manda la tradición la ha acompañado hasta el Regajito junto con la corporación municipal, donde se ha producido la despedida oficial del pueblo y del patrón. Un momento muy emotivo en el que los porteadores de la imagen la han vuelto hacia el pueblo y la han alzado en brazos con el acompañamiento de la Banda de Música Municipal.

Los pétalos de flores tirados desde los balcones han puesto el color a la despedida de la patrona, que ha vuelto a su santuario acompañada de esos cientos de fieles que han hecho los 11 kilómetros que lo separan de Villanueva de Córdoba. La coincidencia con el puente de la Hispanidad y la Feria del Jamón ha hecho que este sea un fin de semana de fiesta y ambiente en la localidad, y con el riesgo bajo de contagios de la actualidad ha traído consigo que sean muchos jarotes los que hayan querido volver a hacer el camino a pie, como siempre. La única diferencia que ha existido respecto a años anteriores es que no se han habilitado ni abierto los puestos de bar y cafetería de la explanada del santuario, pero el buen tiempo y las ganas de romería de los jarotes han dejado una estampa tradicional, con las familias comiendo bajos las encinas de la dehesa.

Volteo de bandera en honor a la Virgen de Luna. Volteo de bandera en honor a la Virgen de Luna.

Volteo de bandera en honor a la Virgen de Luna. / Sánchez Ruiz

A las 12:30 la Virgen de Luna ha entrado en su santuario, donde se ha concelebrado la misa por parte del párroco de San Miguel, José Félix García y el párroco de Pozoblanco y arcipreste de Pozoblanco y Villanueva de Córdoba, José María González. Una concelebración que ya se sucedió el pasado jueves en la parroquia de San Miguel, durante la novena de despedida, en la que también estuvieron juntas las directivas de las hermandades de Pozoblanco y Villanueva de Córdoba, lo que significó una celebración de hermanamiento en torno a la patrona que no se producía desde hace tiempo.

El sábado, la Virgen de Luna se despidió de su pueblo saliendo en procesión por algunas calles cercanas a la parroquia de San Miguel, un hecho que se echaba de menos entre sus fieles que en el 2020 no pudieron recibir a la patrona y despedirla con normalidad por la pandemia. Por eso, los actos en torno a la despedida y Romería de Llevada de la Virgen de Luna se han vivido con intensidad y con la presencia de muchos fieles, más incluso que en los años anteriores a la pandemia, que han querido estar junto a su patrona en estos momentos tan significativos en torno a la advocación.

La Virgen de Luna ha procesionado como manda la tradición alrededor de su santuario antes de descansar en su altar hasta que vuelva a ser portada hasta Pozoblanco, algo que está previsto para el 20 de febrero de 2022.

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