La agricultura está de enhorabuena. La apuesta firme por la investigación en la obtención de nuevas variedades de olivar por parte de la Universidad de Córdoba y la empresa Balam Agriculture ha conseguido su primer resultado comercial: Sultana, la nueva variedad que va a revolucionar las plantaciones en alta densidad.

“Estamos convencidos de que Sultana supone un antes y un después en la producción de olivar en alta densidad. Nos encontramos ante una variedad con una rentabilidad muy por encima de todas las que se han comercializado hasta ahora”, ha declarado Pedro Gálvez, socio y director de Services en Balam Agriculture. “Sultana es la clave del presente para afrontar la agricultura del futuro. Estamos convencidos de que reinará en las fincas de olivar en alta densidad, y quien apueste por esta variedad hoy tendrá una ventaja competitiva mañana”, ha incidido.

El acto de la firma por la que Balam se convierte en el único proveedor para Europa que puede comercializar y multiplicar la variedad de olivar Sultana en los próximos 30 años se ha celebrado este miércoles en la sala de juntas de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y de Montes (Etsiam). En el mismo, Pomología SL ha cedido esta exclusividad a la empresa cordobesa.

Por parte de Balam Agriculture han acudido Silverio Gálvez, Máximo Cañete, Fran Gálvez, Pedro Gálvez y Teresa Carrillo, que han estado acompañados por parte del grupo Ucolivo, obtentor de la variedad, en concreto Carlos Trapero, Pedro Valverde y Concepción Muñoz, investigadores de la Unidad de Excelencia María de Maeztu–Departamento de Agronomía de la UCO (Dauco), dirigida por el catedrático Emilio Camacho. Además, por parte de Pomología SL., empresa participada por la UCO y encargada de la gestión de sus variedades de olivo, han asistido Diego Barranco y Luis Rallo, junto a la vicerrectora de Innovación y Transferencia de la UCO, Lourdes Arce, y la directora de la Etsiam, Rosa Gallardo.

¿Cuáles son las características de Sultana?

Esta nueva variedad presenta una serie de características agronómicas que “la han convertido en la apuesta de la Universidad, así como de Balam Agriculture, para presentarla en sociedad y ponerla en el mercado por la revolución que supone”, ha apuntado Pedro Valverde, investigador de Dauco. “Sultana es el resultado genotípico del cruce de la variedad Arbosana, como parental femenino, y Sikitita, como parental masculino, que a su vez es resultado de otro cruce entre las variedades Picual y Arbequina. Esto supone que Sultana tiene lo mejor de cada variedad”, ha añadido.

Plantación de la nueva variedad lanzada por Balam Agriculture y la Universidad de Córdoba.

“Sultana se caracteriza por su pronta maduración y precoz entrada en producción; tiene un buen rendimiento graso; por su porte y vigor se adapta perfectamente a la producción en alta densidad, y su fruto es de mayor tamaño en comparación con el resto de las variedades para este tipo de plantaciones. Además, el aceite es de muy alta calidad”, ha insistido Valverde como carta de presentación de la nueva variedad, que para todo su equipo “supone un gran objetivo alcanzado como recompensa al trabajo de muchos años”.

Además de las características ya mencionadas, cabe destacar que “al ser una variedad muy temprana, permitirá al agricultor posicionar un aceite de una gran calidad en el mercado, adelantándose al resto de plantaciones con otras variedades”, ha apuntillado Pedro Gálvez.

Programa de mejora genética

Galpagro, que junto a CBH dan vida a lo que ahora es Balam Agriculture, lleva muchos años apostando por la investigación y el desarrollo. De la mano de la Universidad de Córdoba implementó su propio programa de mejora genética.

“Tener a Sultana como una variedad lista para la comercialización es para Balam Agriculture un hito muy importante y una gran aportación de nuestro departamento de I+D al sector del olivar. En Sultana se han visto características que han sobresalido sobre los más de 1.400 genotipos que han pasado por las distintas fases de evaluación”, ha apuntado Teresa Carrillo, doctora ingeniera agrónoma y directora del departamento de I+D.

Foto de familia de todos los asistentes a la firma del acuerdo de Sultana.

Dentro de la línea de colaboración que mantienen UCO y Balam Agriculture para la mejora genética en variedades de olivar, “se ha ampliado el acuerdo para incorporar a estudio 1.500 nuevos genotipos a los 1.400 que ya se encontraban en evaluación y entre los que ya tenemos varios candidatos que presentan características muy interesantes para el mercado”, ha aclarado Carrillo.

Desde Balam Agriculture, sus máximos dirigentes, Silverio Gálvez y Máximo Cañete, han dejado patente en el acto que “a lo largo de todos estos años se ha hecho una gran apuesta por la investigación y hemos sido muy ambiciosos sometiendo a estudio tantos genotipos”. A su vez, han querido hacer público que “sin el respaldo, implicación y conocimientos de la Universidad de Córdoba, este tipo de proyectos son inviables. Hoy nace para el mercado una variedad para la agricultura del futuro”.