Dos vecinos rambleños, José Antonio Perote Muñoz y Ladislao Nieto Gil, han decidido viajar en Vespino a Santiago de Compostela con el siguiente objetivo: respaldar la inclusión del botijo como emoticono del Whatsapp (emotijo). La idea surge por la pasión de ambos jóvenes por el tradicional vehículo a motor de 49 centímetros cúbicos: "Estábamos tomando una cerveza en el bar Botijo Blanco y comentamos que teníamos que hacer algo interesante con estos vehículos y surgió el proyecto".

El viaje estará dividido en cuatro etapas de 250 kilómetros cada una, más dos días de estancia en la capital gallega, donde está previsto que sean recibidos por el alcalde de Santiago de Compostela, Martiño Noriega (Compostela Aberta). La salida está prevista para el día 16 de agosto. Durante el trayecto, además, José Antonio y Ladislao entregarán un botijo por cada pueblo que visiten siguiendo el recorrido a través de la Ruta de la Plata. Para concretar la ruta, han recibido la ayuda de la Oficina de Turismo de La Rambla: "Ellos se han encargado de contactar con todos los pueblos que vamos a visitar, ayuntamientos, bares, hostales…".

La aventura arranca el 16 de agosto y se consta de cuatro etapas de 250 kilómetros

Los aventureros han decidido no llevar vehículo de apoyo para vivir la experiencia aún más. Y a esto se suma la inquietud por la longitud de las jornadas en carreteras teniendo en cuenta las capacidades de un Vespino: "Rondarán los 250 kilómetros diarios. Teniendo en cuenta que vamos a una velocidad de 35 o, como mucho, 40 kilómetros por hora, pasaremos unas siete u ocho horas diarias en ruta, más las pertinentes paradas para repostar y avituallamiento".

Las diferentes escalas serán en Villanueva de la Serena, Guijuelo, Puebla de Sanabria y, al fin, Santiago de Compostela. Para el camino de regreso, aún están por determinar los pueblos a visitar, aunque Orense ya está confirmado. La aventura arrancará el día 15 de agosto en el recinto ferial, coincidiendo con los fuegos artificiales que ponen fin a las fiestas patronales de San Lorenzo, aunque a la moto se subirán "a eso de las seis de la mañana del día 16". "Esperemos que todo salga bien y podamos llevar nuestro botijo a Santiago de Compostela y así poder dar a conocer la cerámica de La Rambla allá por donde pasemos", dicen confiados. Y quién sabe si a la llegada podrán enviar un emoticono con forma de botijo.