Adelgazar a la mitad, porque se suma a otra reducción ordenada hace unos años cuando se distinguían hasta cuatro líneas, la configuración lectiva del colegio Virgen de Araceli, uno de los centros históricos y de mayor capacidad funcional de Lucena. Es la intención inicial de la delegación territorial de Educación, plasmada en el Plan de Escolarización para el curso 2021-2022. Una distribución aún condicionada a hipotéticos reajustes ulteriores.

La Junta, en su previsión orientada a partir de septiembre, únicamente mantiene las tres líneas educativas en un colegio de la localidad: el Al-Yussana. Por el contrario, rebaja a dos las clases de Infantil de 3 años en los colegios Virgen de Araceli y El Prado.

El ampa del Virgen de Araceli ya se ha movilizado y ha conseguido, en sólo unos días, reunir casi 900 firmas, que se adhieren a esta causa educativa, en la plataforma web change.org.

El colectivo de padres tilda de “injustificada” la reorganización de Educación porque el número de matrículas de primer acceso al centro se cifran en 64 y, por lo tanto, con tres aulas, la ratio se movería entre 21 y 22 estudiantes por unidad, una cifra considerada adecuada por el ampa.

En el capítulo de argumentaciones contra esta pretensión avanzada, esgrimen, además, que, actualmente, 14 familias quedarían privadas del “derecho a la libre elección de centro” que “ampara” el decreto de escolarización porque las plazas quedan limitadas a 50. Además de las peticiones ordinarias y preferentes, en este proceso se han recibido, en el centro contiguo al Paseo de Rojas, 101 solicitudes subsidiarias.

Reyes Maíllo, presidenta del ampa, explica y defiende que el conjunto de módulos presenta “unas infraestructuras totalmente apropiadas” para alojar las tres líneas en cada curso. Durante este ciclo anual 2020-2021, el número de alumnos inscritos en este colegio de Infantil y Primaria asciende a 662.

Desde el ampa hacen alusión, igualmente, al “nerviosismo” de los padres ante una coyuntura que califican de “cruel” ya que, en algunos casos, a familias que residen a 50 metros del centro se les impide disfrutar de este colegio.

Paralelamente a la plasmación de firmas, los propios padres han comenzado a telefonear a la delegación territorial de Educación, al objeto de expresar la disconformidad y la indignación, y tanto la directora como la presidenta del ampa ya han pedido, formalmente, una reunión con Inmaculada Troncoso, delegada territorial de Educación en la provincia de Córdoba.