La N-432, objeto de reivindicaciones desde hace años por su peligrosidad, registró una media de 2,6 accidentes de tráfico a la semana durante el pasado año 2017 en su tramo de Córdoba, según la información facilitada ayer a el Día por la Subdelegación del Gobierno. La carretera que conecta Granada y Badajoz y atraviesa la provincia cordobesa de Norte a Sur fue escenario, en concreto, de 137 accidentes, de los que tres de ellos se saldaron con víctimas mortales; en 2017, las carreteras provinciales contabilizaron más de 20 fallecidos, frente a los 14 del ejercicio anterior. La Subdelegación recordó que se trata de la vía con más kilometraje de la provincia, en total, 223, lo que implica duplicar a la siguiente en longitud, que es la autovía A-4, con apenas un centenar de kilómetros.

El último siniestro grave en esta vía convencional se produjo el pasado 23 de marzo, cuando un hombre de 53 años falleció en un choque entre un camión de basura y un turismo en el término municipal de Córdoba. El accidente de tráfico se produjo a las 19:00, cuando varios testigos alertaron de una colisión frontal entre un camión de recogida de basura y un coche en la Granada-Badajoz. Y unos días antes, el 15 de marzo, otros dos conductores fallecían y dos personas resultaron heridas de gravedad en otro siniestro en la misma vía, concretamente a la altura del kilómetro 322, en el término municipal de Nueva Carteya. El suceso se produjo como consecuencia de un choque frontal entre un vehículo Peugeot, en el que viajaban dos personas en dirección a Baena, y una furgoneta Iveco, que circulaba en sentido Córdoba. Los dos conductores fallecieron.

La nacional ya ha sido escenario de dos siniestros con tres muertes en 2018

Debido a su peligrosidad, la N-432 es desde hace décadas objeto de reivindicación para su conversión en autovía en todo su eje de influencia. Y el accidente de Nueva Carteya reabrió estas protestas. Así, el Ayuntamiento de Castro del Río convocó junta de portavoces de carácter urgente para abordar la situación, según informó su alcalde, José Luis Caravaca (IU). En la vecina localidad de Baena, el Ayuntamiento incluyó en su Pleno una moción para exigir que los próximos presupuestos generales del Estado incluyan al fin una partida específica para el desdoblamiento de la carretera.

También el presidente de la Diputación de Córdoba, Antonio Ruiz, como representante de la mesa de trabajo por la reconversión de la N-432 en autovía, informó hace unos días de la remisión de una carta a la mesa y los portavoces de la Comisión de Fomento del Congreso de los Diputados con el fin de solicitar una reunión en la que trasladar a la Administración central "la perentoria necesidad de que se retome con urgencia el proyecto de la autovía Badajoz-Granada A-81". En dicha misiva, el máximo representante de la Diputación incidió en que "la conversión de la N-432 en autovía ha sido y es una reivindicación permanente de todos los territorios por los que transcurre, por numerosas razones de peso". Así, prosigue Ruiz, "entre ellas podríamos destacar la mejora de la seguridad vial, con numerosos puntos negros y múltiples accidentes, y el desarrollo económico de la zona de influencia, con especial hincapié en la agroindustria, el turismo o el sector industrial".

De igual modo, el presidente reivindicó en el documento que "Córdoba y Granada son las únicas capitales de provincia que no están unidas por autovía, pese a situarse en los primeros puestos del ranking de ciudades más visitadas de España y Europa". Por tanto, consideró necesaria la conversión, "pues uniría por autovía Badajoz con Granada pasando por Córdoba, lo que supondría crear un eje estratégico, comercial y turístico así como la comunicación con Portugal".

Lo cierto es que la siniestralidad en la N-432 mantiene su índice a lo largo de los años, pues también en 2016 se registraron 2,6 accidentes a la semana; en concreto, 140 incidentes, sólo tres menos que en 2017. Aparte de los tres fallecidos -uno más que en el año anterior, cuando fueron dos-, la N-432 dejó siete heridos hospitalizados y 47 leves, por lo que en cómputo general hubo 57 víctimas en total. Respecto a 2016, este volumen supuso una disminución del 17,5%. En cuanto a los accidentes con víctimas no mortales, en 2017 hubo 30 -frente a los 38 de 2016-; un total de 104 sin víctimas y tres con fallecidos. Todos sumaron 137 incidentes.

Para el Real Automóvil Club de España (RACE), basándose en datos de la Red de Carreteras del Estado, la Granada-Badajoz es la más peligrosa de Córdoba, con dos tramos negros: entre los puntos kilométricos 306,6-332,1 (a la entrada de la localidad de Espejo) y 189,9-198,0 (cerca de Peñarroya-Pueblonuevo).

La N-432 sirve de vía de salida del tráfico procedente de la A-339 desde Priego de Córdoba, Cabra, Lucena, Baena y Alcalá la Real, por lo que su volumen de tráfico aumenta a partir de este punto hasta Granada. También es la única vía para que los ciudadanos de Córdoba alcancen la ciudad de Granada de manera directa, aunque en los últimos años, a raíz de la culminación de la autovía a Antequera, la mayoría de los conductores prefiere utilizar esta vía de alta capacidad y enlazar en la localidad malagueña hasta Granada, también por autovía.