La Hermandad de la Virgen de la Aurora, patrona de Monturque, está desarrollando a lo largo del presente año una serie actos especiales con motivo del LX aniversario de su reorganización. Esta programación ha tenido este jueves su punto álgido con la salida extraordinaria de la imagen por las calles de la localidad, que ha sido posible gracias a un pequeño claro en una jornada marcada por la lluvia.

Ha sido “una manera distinta a como estamos acostumbrados a verla”, como lo ha definido su hermano mayor, Francisco Javier Rueda. Y es que la patrona ha disucrirdo por un recorrido y con horario distintos a lo que viene siendo habitual. Además, de forma extraordinaria, ha estado acompañada no solo por los Campanilleros de la Aurora, sino que también se han sumado al desfile otros grupos de localidades cercanas como Benamejí o Cuevas de San Marcos.

Tras la eucaristía que se celebró a las 09:00, el cortejo partió de la parroquia de San Mateo Apóstol pasando por puntos interesantes como la ermita del Santísimo Cristo de la Vera Cruz, donde se hizo un acto conjunto con su Hermandad, o la barriada Virgen de la Aurora, que lleva su nombre y por donde nunca antes había pasado. En este punto, la alcaldesa, Teresa Romero (PSOE), inauguró un retablo cerámico como recuerdo de esta feliz jornada, que tuvo que modificarse levemente debido a las precipitaciones.

A fin de anunciar esta procesión, y a su vez el propio aniversario, la Hermandad encargó al pintor lucentino Manuel Espejo un cartel conmemorativo en el que se presenta una pintura alegórica de la Virgen de la Aurora acompañada por sus campanilleros con el que “queremos reconocer la labor que durante 60 años han ido haciendo muchos hermanos para preservar esta tradición que es una de las más singulares de Monturque”.