La Mesa del Regadío demanda más concesiones y mejores infraestructuras

La Mesa del Regadío de Córdoba demandó ayer más concesiones y una mejor conservación de las infraestructuras para fomentar este sistema de cultivo, que "supone un elemento estratégico en Córdoba y un sector de vital importancia como generador de empleo y riqueza de primer orden", como indicó ayer el delegado de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Francisco Zurera, durante la presentación de unas jornadas que, el próximo lunes, 5 de junio, analizarán el presente y el futuro del sector.

La provincia cuenta actualmente con 121.000 hectáreas de regadío, el equivalente al 15% de las tierras cultivada, principalmente en los ejes de los ríos Guadalquivir y Genil. Todas las organizaciones agrarias presentes en la Mesa -Asaja, COAG, UPA y las cooperativas- consideraron esta superficie insuficiente, sobre todo debido a la demanda, y reclamaron nuevas concesiones, aunque Zurera aclaró que "no se trata de pedir por pedir". La cuantificación de cuántas hectáreas más podría asumir Córdoba, que es la provincia con más agua embalsada de toda Andalucía, será uno de los objetivos de las jornadas, que se desarrollarán en el hotel Córdoba Center.

"El regadío es riqueza, es ampliar el abanico de posibilidades de producción, conlleva el uso de mano de obra más intensiva, fomenta la innovación y facilita la incorporación de jóvenes agricultores. No podemos renunciar al regadío, hay que mantener lo que tenemos y ampliarlo en la medida de lo posible", reivindicó Zurera, quien hizo suyas las demás peticiones de las organizaciones de la Mesa. "Desde la Delegación -sostuvo Zurera- somos los primeros en defender las demandas y sugerencias del sector en otros foros, reivindicando mejorar la situación de la provincia y haciendo nuestras las necesidades del regadío cordobés".

Así, el secretario general de UPA Andalucía, Miguel Cobos, señaló que su organización considera el agua como un bien escaso y muy apreciado para la agricultura y ganadería y entre otras medidas entienden la necesidad de profundizar en la modernización de los regadíos, en la revisión de las concesiones de agua, creen en los bancos públicos de agua, en la reutilización de aguas regeneradas y en potenciar la construcción de microembalses o balsas laterales.

Para la secretaria general de COAG Córdoba, Carmen Quintero, el agua es un recurso limitado del que hay que hacer un buen uso y hay una necesidad de regar. Además, señaló que desde COAG reivindican que se aumente el número de hectáreas de regadío e incidió en el problema de la escasa conservación de los pantanos. Para Quintero, las fincas de regadío "son cultivos sociales que generan mucha mano de obra y están fijando y vertebrando el territorio del medio rural".

El secretario general de Asaja, Rafael Navas, confió en que el encuentro sirva para decir "basta ya al agravio de Córdoba". Recordó que es la provincia que más agua embalsa, el 50% de la cuenca del Guadalquivir, y la que menos regadío tiene, el 16%. Navas incidió en que "hay que revertir este agravio histórico de forma inmediata" y señaló que hace falta más agua para Córdoba, hay que incrementar la superficie de riego, fundamentalmente de olivar, ya que es el cultivo más riqueza y empleo genera. También llamó a terminar las obras inacabadas, como el Genil-Cabra, y a que se publiquen nuevas ayudas para modernizar regadíos como los de toma directa, que "históricamente han estado en situación de desventaja", lamentó. El representante de Asaja abogó por un modelo nuevo de agua que aproveche las escorrentías de invierno, permita con facilidad hacer nuevas balsas y aproveche las aguas residuales.

El presidente de Cooperativas Agroalimentarias, Rafael Sánchez de Puerta, señaló por último que es fundamental la iniciativa de poner en marcha la Mesa del Regadío en Córdoba y comparó que hay otros territorios cercanos están impulsando este sistema, y "ello lleva a una dinamización de la agricultura, de los mercados, una generación de empleo, todo lo que aquí necesitamos".