Los nuevos ayuntamientos de La Guijarrosa y Fuente Palmera asumirán parte de la deuda de Santaella y Fuente Carreteros, respectivamente, como consecuencia de su segregación. Así consta en los decretos de la Consejería de Presidencia, Administración Local y Memoria Democrática, publicados ayer en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) y que suponen el inicio de un largo proceso burocrático que se prolongará durante tres meses.

En ambos casos, el municipio matriz y el nuevo deberán formalizar un convenio al objeto de determinar la cantidad que hubiera de transferirse de uno a otro en concepto de las deudas y créditos asumidos. En el caso de la Colonia, Fuente Carreteros podrá asumir como máximo el 10,26% de estas obligaciones, porcentaje de población que pierde a raíz de la segregación. El caso de La Guijarrosa es más pronunciado, ya que podría responsabilizarse de hasta el 22% de la deuda vigente en Santaella.

El alcalde carretereño, José Manuel Pedrosa (Olivo), recordó ayer que hace 30 años, cuando el municipio se constituyó como entidad local autónoma (ELA), "asumió la deuda en aquel momento" y, desde entonces, "las contabilidades han funcionado de manera totalmente separadas". Así, únicamente quedaría pendiente la liquidación de los servicios comunes correspondientes al actual ejercicio económico, dijo Pedrosa.

En el caso de La Guijarrosa, su alcalde, Manuel Ruiz (Candidatura Independiente), aseguró que "no existirán problemas" y avanzó que ya han mantenido las primeras conversaciones con el regidor santaellano, José Álvarez (PSOE), para concertar una reunión que previsiblemente se celebrará la próxima semana. "Pondremos todas las cifras sobre la mesa y asumiremos nuestras obligaciones", dijo Ruiz. Cuando La Guijarrosa se constituyó como ELA en el año 2007, nació "libre de cargas".

Entre los motivos que el decreto enumera para aceptar la segregación de ambos territorios, están la existencia de "motivos permanentes de interés públicos", relacionados con la planificación territorial de Andalucía; que entre los núcleos hay "una notable dificultad de acceso", o que el nuevo municipio cuenta con unas características que singularizan "su propia identidad, sobre la base de razones históricas, sociales, económicas, laborales, geográficas y urbanísticas".

En el caso de La Guijarrosa, el decreto acredita "la localización de ciertos vestigios ibéricos y elementos arquitectónicos de la época romana, así como la herencia cultural árabe que aún pervive". Destaca, sobre todo, la "fuerte personalidad" adquirida desde la Edad Media y, sobre todo, su "expansión económica" basada en la producción generada por sus olivares a partir del siglo XVIII. Esto posibilitó el establecimiento de un asentamiento humano "estable y diferenciado" de Santaella, con festividades propias y con un "fuerte sentimiento" de identidad por parte de su población.

Respecto a Fuente Carreteros, existen también "peculiaridades culturales y sociológicas propias", así como "diferencias entre carretereños y palmereños en sus respectivas concepciones vitales, dando lugar a que ambos tipos de intereses y aspiraciones, en muchos aspectos antagónicos, hayan generado una serie de divergencias de difícil o imposible definición que han venido minando una unión artificial, nunca efectiva ni afectiva". Sobre las motivaciones económicas, en la memoria se hace especial hincapié a la dificultad que supone prestar unos servicios "de forma eficaz" por parte de Fuente Palmera a los vecinos de la hasta ahora ELA. "La distancia entre ambos núcleos repercute en la calidad de los servicios y origina un encarecimiento", señala el decreto.