Una nueva reunión, pero el mismo argumento. La Junta de Andalucía ha decidido posponer la conversión en autovía de la A-306 para que Córdoba y Jaén estén unidas por una vía de alta capacidad. Tras el anuncio de la consejera de ramo, Marifrán Carazo, de hace unos días, ahora le ha tocado al del director de general de Infraestructuras de la Consejería, Enrique Catalina, mantener un encuentro con los alcaldes de las dos provincias afectados por este proyecto.

La Junta de Andalucía ha informado de que ha reunido en Jaén a una veintena de alcaldes de municipios de las provincias de Jaén y Córdoba para ofrecer detalles técnicos de los proyectos de mejora de las carreteras A-306 y A-311 que discurren por sus términos municipales, recogidos como las soluciones más viables a corto y medio plazo en los estudios de viabilidad impulsados por la Consejería. La inversión estimada para estas mejoras en la A-311 sería de 35,3 millones de euros, mientras que la A-306 requeriría un presupuesto estimado de 23,3 millones, 58,6 millones en total para ambas vías.

En el caso de la Córdoba-Jaén, ha sido 14 los alcaldes participantes en una cita convocada "para resolver dudas", según la Junta, que sigue manteniendo que la autovía a Jaén no es viable en estos momentos por su alto coste. A esta reunión han asistido el delegado del Gobierno, Antonio Repullo, y la delegada territorial de la Consejería, Cristina Casanueva. Para la consejería, el desdoble de la A-306 "se dispararía" hasta los 450 millones de euros.

En cuanto a la mejora que se plantea, la idea expuesta es la misma que ya ofreció el lunes la Junta de Andalucía. Es decir, una inversión de 23,3 millones de euros, de manera que se aboga por el refuerzo del firme en los 58 kilómetros de trazado con una actuación dividida por tramos, además de una reordenación de los accesos directos a las fincas colindantes bajo la misma fórmula que en la A-311 de construir caminos de servicios. Esa operación eliminaría más 150 accesos, además de servir como camino alternativo para vehículos agrícolas. Por último, se plantean 2,7 kilómetros de nuevos carriles lentos en dos tramos con mucha pendiente.