Campiña Sur

Fernán Núñez recibe el sí definitivo a la ayuda que permitirá al fin rehabilitar el Palacio Ducal

  • Las obras costarán 1,6 millones de euros, de los que algo más de un millón son aportados por el 1,5% Cultural del Ministerio de Fomento

Palacio Ducal de Fernán Núñez.

Palacio Ducal de Fernán Núñez. / El Día

Tras muchos años de espera, la rehabilitación integral del Palacio Ducal de Fernán Núñez será al final una realidad. El Ayuntamiento fernannuñense ha recibido este martes, 21 de diciembre, la resolución definitiva de adjudicación de la subvención del 1,5% Cultural del Ministerio de Fomento para la restauración y conservación del monumento, uno de los proyectos más esperados desde hace décadas en la localidad.

Con esto, el alcalde, Alfonso Alcaide (IU), ha anunciado que "en los próximos días" se iniciará la licitación de las obras de rehabilitación por un valor de 1.641.642 euros. De este volumen, 1.044.149 provienen de la subvención ministerial, mientras que 597.492 euros proceden de fondos propios del Consistorio.

"Nuestro pueblo está de enhorabuena, ya que por fin vamos a poder ver el Palacio Ducal terminado, con lo que ello significa para el desarrollo económico, turístico y cultural de Fernán Núñez", ha celebrado el primer edil.

El Ayuntamiento dispone ya del proyecto de ejecución, redactado por la empresa local Arquinexos; el documento, además, cuenta con la aprobación de la comisión de cultura de la Junta de Andalucía y del Pleno del Ayuntamiento. Una vez sometido a exposición pública, estará aprobado definitivamente.

Con 2.500 metros cuadrados de jardines y una planta construida de 1.200 metros en tres alturas, el Palacio Ducal, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), es una excepción arquitectónica en la provincia de Córdoba.

De estilo neoclásico, fue mandado construir por Carlos José Gutiérrez de los Ríos, VI conde de Fernán Núñez, cuando era embajador en la ciudad de Lisboa. Inspirado en la fachada del Palacio de las Necesidades de la capital portuguesa, donde se encontraba la embajada española por aquel entonces, es fácil imaginar el impacto que produciría su construcción en 1787 en un municipio de casas blancas y bajas cuyo edificio más destacado era la robusta iglesia de Santa Marina de Aguas Santas.

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