Durán ve "deleznable" que el PP use como "arma política" el escándalo de los bomberos

El secretario provincial del PSOE, Juan Pablo Durán, consideró ayer "deleznable" que el gobierno de la Diputación provincial utilice "como arma política" el caso del Consorcio Provincial de Extinción de Incendios con el objetivo de "hacer una crítica política a anteriores gobiernos cuando ellos mismos en su propio devenir diario tampoco fueron capaces de detectarlo". Tal y como ayer publicó El Día, el exgerente del Consorcio, Antonio Navarrete, imputado por supuestos delitos continuados de prevaricación y malversación de caudales públicos, no sólo habría hecho transferencias de dinero de la entidad a su cuenta particular con el PSOE al frente de la Diputación, sino también con el PP en la presidencia.

Un informe firmado por el actual presidente del consorcio, Manuel Gutiérrez, detecta "varias transferencias", sin que "haya aportado ninguna justificación de tal actuación". Navarrete, en concreto, habría desviado el 7 de julio de 2011 una cuantía de 8.327 euros a su cuenta particular, tan sólo unos días después de que el PP tomara posesión del gobierno. El último desvío se produjo supuestamente el 26 de octubre de aquel año, por importe de 9.312 euros.

El dirigente socialista recordó que el caso no se detectó "hasta que no ocurrió un hecho sorpresivo", que -subrayó- "no estaba preparado y que no es una investigación que haya hecho el presidente del Consorcio y lo haya descubierto". "De buenas a primeras, un día descubre que ha pasado un hecho que le pone en evidencia la Tesorería de la Seguridad Social", dijo. Durán insistió en que la actitud del gobierno para "utilizar" el caso "como arma política" es "deleznable y pobre".

"Qué más da el tiempo" en que ocurrieron los hechos -dijo-, pues reflexionó que "por robar mucho durante mucho tiempo no se le condena a uno más", sino que "se le condena por robar". "Da igual que robe un rato de una hora o durante 50 años", apostilló. El Juzgado de Instrucción número 2 cifra en 626.000 euros los fondos que el exgerente se había transferido a cuentas privadas. Durante la gestión de Navarrete, se abrió un agujero en el consorcio que alcanzó los 15 millones de euros.