La Guardia Civil, dentro del marco de la Operación Peñarroja, ha desarticulado un grupo criminal que actuaba en la zona Norte de la provincia, en concreto en el Alto Guadiato, compuesto por cinco cinco personas que supuestamente se dedicaban al tráfico de drogas.

Las investigaciones se iniciaron tras detectar el Instituto Armado un aumento de las infracciones por tenencia y consumo de drogas en la zona Norte de Córdoba que estaba generando preocupación y malestar entre los ciudadanos, lo que hizo sospechar a los investigadores que en las inmediaciones de dicha zona podría haberse establecido un punto de venta de drogas al menudeo.

El desarrollo de la investigación permitió identificar a todos los integrantes del grupo y comprobar el modus operandi utilizado, que consistía en que, si bien cada uno actuaba de forma individual en la venta al menudeo de la droga, todos ellos utilizaban los mismos puntos para aprovisionarse de la droga en Córdoba capital.

Asimismo, la Guardia Civil pudo saber que uno de los integrantes del grupo se desplazaba con habitualidad a la capital para adquirir la cocaína que posteriormente transportaba hasta Peñarroya-Pueblonuevo, oculta en el interior de un vehículo.

Este hecho se pudo constatar tras ser interceptado a su regreso de uno de estos desplazamientos, donde se le intervino ocho gramos de cocaína que transportaba oculta en el interior del coche. Tras esta detención, el sospechoso cambió su modus operandi, desplazándose a otras localidades de la zona Norte para aprovisionarse de droga que luego vendía a potenciales consumidores de la zona.

El avance de la investigación permitió averiguar la forma de actuar para distribuir la droga por otro de los integrantes del grupo, que básicamente consistía en dejar las sustancias en los buzones de los domicilios de las personas que las compraban.

El desarrollo de la operación permitió ubicar los puntos de venta que mantenía el grupo, establecidos en Peñarroya-Pueblonuevo, Belmez, Fuente Obejuna y Ojuelos Altos, así como dos de los lugares de ocultación de la droga. Uno de ellos se encontraba en la aldea de Ojuelos Altos, en una zona de escaso tránsito de vehículos y población, concretamente en una cuadra ubicada en una zona inaccesible para vehículos, y el otro en una zona próxima a la capital, en cuyo interior permanecía una persona armada que hacía las veces de guarda, donde se localizaron dos armas de fuego, dos paquetes envasados con un total de 850 gramos de cocaína y dos plantaciones indoor de marihuana con un total de 70 plantas. .

Tras realizar las comprobaciones pertinentes, fueron localizados los puntos de venta de droga y los de guardería que la organización había establecido en las poblaciones anteriormente citadas. Los agentes obtuvieron indicios racionales de la existencia de tráfico de drogas, tales como gran afluencia de personas a distintas horas del día, principalmente consumidores habituales de estas sustancias, así como las medidas de seguridad utilizadas por el grupo.

La Guardia Civil decidió dar por concluida la fase de investigación y pasar a la fase de explotación, solicitando de la Autoridad Judicial mandamiento de entrada y registro para los inmuebles utilizados habitualmente por el grupo criminal, ocho domicilios y un garaje.

Fruto de los registros efectuados, además de la detención de los cinco integrantes del grupo, el Instituto Armado ha logrado intervenir 850 gramos de cocaína de gran pureza, así como otros 25 gramos preparados y dispuestos para su venta en dosis, dos plantaciones indoor de marihuana que fueron completamente desmanteladas y albergaban 70 plantas. También fueron intervenidos más de 600 euros en billetes fraccionados, dos armas de fuego (un revólver y un rifle municionados, preparados y dispuestos para su funcionamiento), así como abundante munición.

Con estas detenciones, la Guardia Civil además de desarticular un grupo criminal muy activo en la venta de drogas, que mantenía puntos de venta en las localidades de Peñarroya-Pueblonuevo, Belmez, Fuente-Obejuna y Ojuelos Altos, ha logrado mejorar el clima de seguridad ciudadana existente en dichas poblaciones.

Las investigaciones han sido dirigidas por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Peñarroya-Pueblonuevo y del Equipo ROCA que opera en la zona Norte de la provincia. En la fase de explotación de la operación han intervenido guardias civiles de las Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Córdoba, Servicio Cinológico con perros adiestrados en la detección de drogas, además de efectivos de Seguridad Ciudadana de la Compañía de Peñarroya-Pueblonuevo.

Diligencias instruidas y detenidos han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial, que acordó el ingreso en prisión de uno de los cinco detenidos.