El actual portavoz del grupo municipal de IU en el Ayuntamiento de Cabra, Manuel Carnerero (IU), ha anunciado su intención de no volver a presentarse como cabeza de lista por su partido a las próximas elecciones municipales, que tendrán lugar en la primavera de 2015. Después de 26 años de concejal en el plenario egabrense -22 de ellos como portavoz de su formación- "ya es lógico que no presente ninguna candidatura más", afirmó Carnerero de manera sorpresiva durante una rueda de prensa en la que varios diputados provinciales de IU explicaban los detalles de la visita realizada al municipio, donde se han entrevistado con colectivos y asociaciones para conocer de cerca sus necesidades y reivindicaciones.

A dos años vista de los comicios locales "posiblemente sea el momento de anunciarlo", indicó el edil, que prefiere así dejar paso a otros miembros de IU "para que se presenten" y "estoy seguro de que lo harán muy bien", apuntó. Pese a esta decisión, Carnerero dejó claro que en ningún caso piensa dimitir de su actual cargo de portavoz en el grupo de IU "porque creo que pese a los resultados que obtuvimos sería de cobardes no estar a las duras y a las maduras". Además, confesó que "después de 26 años posiblemente debía haberme ido bastante tiempo atrás" reconociendo que aunque deje la primera línea política e institucional seguirá colaborando con el partido como militante de base.

Mientras, el diputado provincial Francisco Martínez (IU) y el propio Manuel Carnerero analizaron el resultado de las reuniones mantenidas con la Asociación de Empresarios y Comerciantes de Cabra -Aeca- de quienes conocieron algunas demandas sobre todo en materia de formación e infraestructuras para el mejor funcionamiento del tejido empresarial local. IU se comprometió a "luchar" para que el proyecto del mercado de abastos se pueda retomar. Martínez destacó la buena sintonía de los diputados provinciales de su partido con el alcalde de Cabra, Fernando Priego (PP), asegurando que coincidieron en reconocer la necesidad de mantener una colaboración entre instituciones para poder mantener un buen nivel de los servicios que se prestan.