Recibir un abrazo es en la mayoría de las ocasiones un gesto reconfortante, y más después de dos años de pandemia y de muchos meses con un duro distanciamiento personal. A no ser que quien te dé ese achuchón sea un ladrón que intente llevarse tu cartera. Es la advertencia que acaba de hacer pública la Policía Local de Castro del Río, que ha advertido de la presencia de un grupo de delincuentes en la provincia de Córdoba que habrían puesto su objetivo en las personas mayores y a quienes asaltan mediante la técnica popularmente conocida como el abrazo cariñoso.

El procedimiento no es otro que el hecho de que una persona se acerca a su posible víctima, normalmente mayores de avanzada edad, y se hacen pasar por un familiar lejano o amiga de algún familiar. El objetivo no es otro que ganarse su confianza y terminar por darles un abrazo, momento que aprovechan para robarles la cartera, cadenas de oro que lleven colgadas al cuello o pulseras.

Otro método que suelen utilizar estas personas para atraer a sus víctimas es dirigirse a estas personas y ofrecerles practicar sexo con ellas, también con el mismo fin.

"Si en alguna ocasión se les acerca alguna persona y se dirigen a ustedes con estos pretextos, lo aconsejable es desconfiar de ellas, alejarse y llamar la atención de cualquier vecino que transite por la calle", ha aconsejado la Policía Local castreña. Acto seguido, hay que llamar inmediatamente a la Guardia Civil.

Es muy importante, advierte la Policía, intentar retener los máximos datos posibles de estas personas (si tienen el pelo corto o largo, color de pelo, estatura, complexión, vestimenta, si llevan bolso u otros objetos colgados, si tienen tatuajes). Cualquier dato es "imprescindible" para su posterior identificación. Del mismo modo, si estas personas se acaban subiendo a algún vehículo es de ayuda memorizar la matrícula, marca, modelo y color.