Tribuna

José María Rossell

Presidente del Grupo Senator Hotels & Resorts

Una nueva etapa para el turismo

Hay que trabajar para que la mayoría de los vuelos se mantengan todo el año. Nos ayuda el clima y los establecimientos hoteleros podrían permanecer abiertos

Una nueva etapa para el turismo Una nueva etapa para el turismo

Una nueva etapa para el turismo / rosell

Con el nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía se crea una magnífica oportunidad para empezar una nueva era para el sector turístico de Andalucía. No hace falta destacar la importancia que tienen el sector turístico para el desarrollo económico de nuestra región, el cual representa el 13% del PIB.

Pero para ello hace falta crear los medios necesarios para conseguirlo y desde el sector hotelero estamos convencidos que se necesitan algunas decisiones de calado.

En primer lugar, se tiene que crear una Consejería de Turismo sin añadirle ninguna otra competencia para que pueda dedicarse en exclusiva y tener un solo objetivo: reforzar el turismo por la vital importancia económica, de creación de empleo y proyección internacional que tiene este sector tan estratégico.

En segundo lugar, el consejero o consejera que sea designado para dicho cargo tiene que ser una persona dialogante y que sepa escuchar y comprender a los profesionales que tanto aportan y han aportado a esta comunidad autónoma desde hace años y que, conjuntamente, puedan sacar adelante proyectos que beneficien a toda Andalucía. Y por supuesto, que todos los mandos intermedios de la Consejería deben ser personas que conozcan el sector en profundidad y, salvo excepciones, cambiar los equipos anteriores, dándole un aire renovador y emprendedor, necesario para triunfar.

Y en tercer lugar es importantísimo poner en marcha de verdad la cogobernanza entre el sector político y el sector privado para aprovechar al máximo el presupuesto de promoción, que afortunadamente es uno de los más altos del país.

Sin duda todo esto ayudará a recuperar los vuelos que habíamos tenido en los distintos aeropuertos de Andalucía hace un par de décadas. Cuando hablamos de aeropuertos me refiero a Almería, que en su mejor momento tenía entre 20 a 30 vuelos semanales de Alemania y ahora no tiene ni uno; desde Bélgica, con vuelos desde Ostende, por ejemplo, y ahora con suerte tenemos uno de Bruselas; Austria, con vuelos desde Viena, así como desde Suecia y Finlandia; desde Irlanda teníamos vuelos desde varias ciudades, entre ellas Belfast, y ahora tenemos un vuelo low cost desde Dublín. Sin olvidar Holanda y el aumento de conexiones con Luxemburgo y uno de ellos hacia Luxemburgo-Almería, Reikyavik-Almería-Luxemburgo, que también se ha perdido. Tenemos que aumentar los vuelos con la República Checa y Eslovaquia, países con los que los hemos tenido y no olvidarnos de Francia y, en especial, de París, donde la Diputación tiene un máximo interés y lo demuestra apostando fuertemente por la Costa de Almería en el Roland Garros. Pero también hay otras zonas de importancia como Lyon y Burdeos, que tienen mucho potencial.

Igualmente, hace unos años teníamos vuelos con Milán que se han perdido y deberíamos intentar recuperarlos, al igual que con otras ciudades como Roma.

A nivel nacional, también hay que aumentar los vuelos desde el norte de España como Santander, Asturias o La Coruña.

El aeropuerto de Jerez, que está perdiendo conexiones, es un fiel reflejo de lo que empezó a pasar en Almería hace unos años con la quiebra y el cierre de las compañías chárter y el incremento de las low cost, perdiendo conexiones con Alemania, Bélgica y Holanda y otros países que no han tenido prácticamente nunca conexiones con Jerez y o Sevilla, que podría igualmente aumentar sus vuelos. El aeropuerto de Granada, que necesita vuelos europeos, y el de Málaga, que, a pesar de tener bastantes vuelos, hay todavía algunos países y ciudades que no tienen vuelos directos con la Costa del Sol y que le vendrían bien. Como ejemplo tenemos que desde la capital de Islandia, Reilyavik, hay tres vuelos semanales a Alicante y no hay ni uno sólo a Málaga, y con seguridad podemos encontrar muchos más ejemplos como este. Si ampliamos los vuelos, podríamos convertirnos en el número uno de España, porque tenemos potencial para ello.

Y además hay que trabajar para que la mayoría de los vuelos se mantengan los 12 meses del año, ya que nos ayuda el clima y los establecimientos hoteleros podían estar abiertos todo el año junto a los comercios, bares y restaurantes.

Con dichos establecimientos abiertos durante todo el año disminuiríamos el paro estacional y aumentaríamos sensiblemente la riqueza de nuestro entorno. En definitiva, todo son ventajas que estamos convencidos apoyará la nueva Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía.

Sin vuelos no hay turismo. Sin vuelos no hay paraíso.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios