46.753 millones

Nunca la Junta de Andalucía había dispuesto de tanto dinero para gastar en sus políticas. El Presupuesto para 2024, aprobado el martes por el Consejo de Gobierno, contempla un montante de 46.753 millones de euros, con un incremento del 5,5% sobre el ejercicio anterior. Esta cifra es consecuencia de una situación de bonanza económica, que propicia un aumento de la recaudación, y de una mejora sustancial de las aportaciones del Estado. De esa cantidad, 15.500 millones se lo llevan los gastos de personal de la gigantesca maquinaria burocrática que representa la Junta, incluidos los sueldos de sanitarios y docentes que ven aumentar levemente sus plantillas. El Presupuesto, como no podía ser de otra forma en una región de las características de Andalucía, tiene una orientación eminentemente social, con la sanidad como principal demandante de recursos. El sistema sanitario andaluz se va a llevar el próximo año 14.246 millones de euros, un 2,9% más que el año anterior pero menos de lo que sube el total de gasto. Ello se debe a que las cuentas de la Junta para 2024, aunque moderadamente expansivas, están lastradas por el endeudamiento y la subida de los tipos de interés: el gasto financiero va a tener una subida del 33%. La sanidad va a seguir consumiendo una tajada muy importante del Presupuesto, pero, como han denunciado los sectores afectados, insuficiente para abordar los muchos problemas que tiene una actividad en la que la demanda es imposible de cubrir. La inversión para el próximo año también alcanza una cifra récord de 5.809 millones, con una atención especial a las infraestructuras relacionadas con el agua. De esta forma se abordan los dos grandes problemas que más preocupan a la Junta: las deficiencias de la sanidad pública y las graves consecuencias de la sequía. En definitiva, el Presupuesto que aprobará el Parlamento gracias a la mayoría del PP responde a una preocupación social y a una buena situación económica que posiblemente no se prolongue mucho en el tiempo.