Artículos

Pepe Cabello

¿Cuándo es luego?

¿Cuántas veces has dicho la expresión "luego lo hago"?

24 de noviembre 2013 - 01:00

Estos días estábamos remodelando nuestra oficina y un pequeño acontecimiento ocurrido con el pintor me hizo reflexionar en este asunto. Resulta que dejó un tornillo empotrado en la pared y nuestra intención era tapar todos los agujeros, para posteriormente redecorar el ambiente que nos rodea cada día en nuestro lugar de trabajo. El tornillo se partió al sacarlo y quedó un trozo pendiente de extraer, pero necesitaba ir a por un alicate para esta labor tan simple. "Luego lo hago", dijo Manuel, el pintor. La realidad es que al día siguiente, se fue de la oficina y el agujero había quedado tal cual, no se había reparado.

Me quedé pensando la cantidad de cosas que "dejamos para luego" y ese luego, simplemente nunca llega. ¿Cuándo es luego? Es como desplazar una responsabilidad a un tiempo que no existe. Luego es el cajón donde guardamos lo que no sé dónde poner… un espacio donde las cosas no ocurren.

Me pregunto si ese luego no es como no querer vivir el "aquí y ahora", es decir, no querer vivir en el presente. Si nos paramos a pensar, todo eso que dejamos para luego, al final o se olvida, o no se hace por desidia o peor aún, se hace y con prisas. ¿Cuánto tiempo ahorraríamos o gestionaríamos mejor si lo que tenemos que hacer lo hacemos en el momento que hay que hacerlo y no luego? Estoy seguro de que seriamos mucho más eficientes. He preguntado esto en cientos de las empresas en las que doy formación, coaching y entrenamiento a equipos y todos coinciden al decir que si lo que tenemos que hacer lo hiciéramos sin dilatarlo en el tiempo, todos seríamos mucho más eficientes. La mayoría también coinciden al asegurar que nos convertimos en "expertos del luego", complicando de esta manera los resultados de las empresas.

¿Y si fuera real que al hacer las cosas cuando hay que hacerlas fuéramos más eficientes? ¿No merecería la pena probar, al menos por esto? Podríamos hacer una prueba de poco tiempo, un mes por ejemplo. Podríamos proponernos estar un mes sin dejar nada para luego. Recuerdo aquel refrán de "no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". Un poco de esto nos vendría genial a una sociedad especializada en los "luegos".

También pienso que ese luego, es una manera que muchas personas tienes de decir no, de una manera poco asertiva. No atreverse a decir no es una de las actitudes que más complican la gestión de nuestro tiempo, que dicho sea de paso es una de las necesidades más imperiosas que tenemos en este momento en nuestra sociedad. Uno de los valores más codiciados en nuestros días es el tiempo. Hay demasiadas quejas de que "no se tiene tiempo para nada" y creo que uno de los factores para que esto sea así es la sensación de estar muy atareados y no estar haciendo demasiadas cosas. Esto es lo que yo llamo el activismo, aquello de "mucho ruido y pocas nueces". Es decir, hacer, hacer y hacer… pero parece que no se avanza.

Incluso esta situación nos lleva a vivir ansiedad aun sabiendo a ciencia cierta que debemos parar y descansar, pero también lo dejamos para luego. La mejor manera de elegir lo que debemos de hacer de manera correcta es tener claras dos cosas: cuál es nuestra meta, hacia donde vamos; y cuáles son nuestros valores, es decir en base a que creencias vamos a tomar decisiones. Estas dos cosas nos ayudarán a saber elegir mis acciones, ya que sólo deberíamos hacer aquéllas que se ajusten a nuestros valores y que nos acerquen a nuestras metas o sueños. Así podremos gestionar mucho mejor nuestra vida y así vivir mucho más intensamente "aquí y ahora" sin tener que "dejar para luego" cosas que sabemos que tenemos que hacer ahora.

Ahora es un buen lugar donde vivir. Ahora es un tiempo real en toda su dimensión. Es ahora lo único que podemos poseer y es ahora el único momento en el que podemos tener control. Es ahora cuando se vive y es ahora cuando se construye el futuro. Es ahora cuando toca darnos cuenta de que no podemos seguir dejando las cosas para luego y es ahora cuando toca asumir la responsabilidad de nuestras vidas. Es ahora cuando hay que arriesgar y es ahora cuando hay que poner toda la acción necesaria para que seamos el productor, el director y el actor de nuestras vidas.

Dejar para mañana todo esto es como decir "mañana es cuando voy a vivir".

Te diría "hasta luego", pero es un lugar y un tiempo que no existe, así que simplemente te deseo un feliz "aquí y ahora" y nos seguiremos viendo si Dios y nosotros queremos.

stats