La campaña Stop. No les robes la infancia alerta sobre los riesgos del uso de las tecnologías por menores y alienta la recuperación de los espacios de la fantasía, animando a potenciar el uso de los cuentos y del juego creativo. El juego les da la oportunidad de “dedicarse al mundo de la fantasía creadora, no la que proponen los videojuegos, sino la que surge al jugar con cosas, al jugar entre sus iguales”. La lectura de cuentos “de toda la vida” les conecta “con un mundo fantástico que les prepara para los desafíos de la vida adulta en un lenguaje que pueden comprender desde su subconsciente profundo”.

Todos los dispositivos que ofrecen entretenimiento a través de pantallas, útiles cuando se tiene la madurez necesaria para usarlos como accesos a fuentes de conocimiento y entretenimiento, “son los peores amigos en el mundo de la infancia”. Con efectos negativos sobre el desarrollo cognitivo. La Asociación Internacional para la Evaluación del Rendimiento Educativo ha hecho público que los niños españoles entre 9 y 10 años han empeorado gravemente en comprensión lectora. Se achaca a la pandemia, pero más responsabilidad tienen la catástrofe educativa y la permisividad familiar. A lo que debe añadirse un reciente estudio de la Universidad de Baleares según el que 9 de cada 10 adolescentes han consumido en alguna ocasión material pornográfico a través de internet y 3 de cada 10 lo hacen diariamente. Siendo lo más preocupante que entre un 15% y un 20% se inicia a los 8 y 9 años, alcanzando la normalización del hábito a los 13.

Afirma la antropóloga, escritora y ensayista Pax Dettoni, impulsora de esta iniciativa: “Los cuentos tradicionales llenos de historias mágicas, hadas, animales que hablan, bosques encantados, brujas, reyes buenos y malos, campesinos valientes y brujas que engañan, son un alimento imprescindible para el niño o la niña si queremos nutrir aquello que habita en ellos y que no se ve. Así como lo es el juego creativo, que se caracteriza por contar con ninguno o pocos juguetes no necesariamente perfectos, ya que de este modo tienen que apelar a su músculo de la fantasía para hacer realidad lo que imaginan. Solo de este modo permitiremos a los más pequeños un desarrollo adecuado”. Se trata de lo más importante: los niños, su educación, su desarrollo cognitivo y la formación de su personalidad. Del cuidado de los más vulnerables y del futuro.