El rumor cobra forma

Hace tan sólo unos días, la primera subida en 11 años de BCE se daba por descontada, y que sería de 25 puntos, también. Pero el mundo es cambiante y es necesario adaptarse, y más si hablamos de una inflación histórica del 8,6% en junio. Así, la subida que ha llevado a cabo la institución que preside Christine Lagarde ha sido de 50 puntos básicos; una subida así no se veía desde el año 2000, en un contexto, además, en el que el riesgo de recesión cada vez cobra más fuerza.

Se esperaban también con expectación noticias sobre el mecanismo antifragmentación, con el que el BCE trata de contener las primas de riesgo de los países periféricos. Para ello, el BCE comprará deuda para evitar que se abra una brecha aún mayor entre los distintos países de la región. A cambio, los países que reciban esta ayuda deben comprometerse a mantener a raya sus desequilibrios presupuestarias.

No son las únicas incertidumbres con las que tienen que lidiar los inversores; aunque no al 100%, el gasoducto Nord Stream 1 ha reanudado el suministro de gas tras las labores de mantenimiento que lo han tenido cerrado 10 días, lo que supone un "cierto" alivio para el mercado.

En Italia, tras la dimisión del primer ministro italiano, Mario Draghi, la incertidumbre política pasa factura a la bolsa italiana (que baja) y a su prima de riesgo (que sube).

El Íbex 35 cierra en 8.012,70 puntos (-0,20%), con Bankinter (+5,59%) como protagonista, tras presentarse unas cuentas que han superado previsiones y convencen a los inversores.