Ni con calor paramos

El otro día, yo creo que era el jueves, empapados los dos de sudor, a más no poder, mi amigo Fabián, del Pozanco, me decía que era la Feria con más calor que habíamos pasado en nuestra vida. Y puede ser que sea verdad, pero que también es verdad que es una conversación que he escuchado muchas veces.

La verdad es que si nos paramos a pensarlo, lo lógico sería que la Feria de Córdoba fuera en otra época, más a primeros de mayo, o en septiembre, porque cuando dice a que haya calor, yo creo que no hay quien nos gane. Este año ha sido tela, que me han dicho que hemos salido hasta en los telediarios por la temperatura.

Eso, como es normal, ha hecho que algunos mediodías la Feria estuviera flojita, que no había quien aguantara allí, pero también estamos los que hemos ido. Y aquí yo levanto la mano. Que el jueves y el viernes al mediodía, estuvimos allí. Que llegar nos costó, es verdad, sobre todo porque nosotros siempre vamos andando, aunque a Cayetano le cueste con la pata de palo, pero el tío resiste, y Soraya es la primera que dice que como San Fernando, andando. Llegar nos costó, pero después estuvimos en una caseta que tenía aire y ahí nos quedamos, que me puse debajo de un chorro y cualquiera me quitaba a mí. Vamos, que ni con aceite hirviendo.

Otro año que lo hemos pasado muy bien, a pesar del calor, y yo he gastado menos que nada, que yo creo que me han invitado todos los días, que nunca me ha faltado un algo en la mano, nunca. Y en la Feria no se come bien, seamos sinceros, pero es que yo tampoco nunca lo intento, porque son casetas y no restaurantes, y quien no se dé cuenta de esto, se confunde.

Como se confunde pidiendo en la Feria como si fuera al Noor de Paco Morales, en la Feria hay que pedir cosas de Feria, como el salmorejo, el flamenquín, la tortilla o si tienen arroz del día, que a mí es lo que más me gusta. En fin, que se nos ha ido mayo, pero que lo hemos disfrutado a tope, ha sido un mayo glorioso. Y ahora con pena, claro, pero tengamos claro que lo importante es que volvamos a disfrutar el mayo del año que viene. Ahora a reponernos y a esperar los pocos cines de verano que vamos a tener y a cruzar los dedos para que el termómetro no suba mucho. Seguimos, claro que sí.