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El mercado de Asia-Pacífico es en general un desconocido para los inversores españoles, pero creemos que de cara a los próximos años presenta un balance rentabilidad/riesgo muy atractivo que aconseja tenerlo en cuenta a la hora de construir una cartera diversificada.
Asia es la región con mayor crecimiento del mundo gracias a sus economías diversificadas, ventajas demográficas y reformas estructurales. Es de las regiones más avanzadas en temáticas como e-commerce, inteligencia artificial, fintech y otras, y sus compañías invierten más en I+D que muchas de sus comparables en mercados desarrollados de occidente. Las valoraciones de las compañías presentan actualmente un descuento muy importante respecto a sus comparables de EEUU. En particular, las grandes compañías tecnológicas de la región cotizan con un descuento superior al 50% respecto a sus comparables estadounidenses, pese a que sus expectativas de crecimiento son superiores.
La región de Asia Pacífico incluye mercados muy diversos, desde los desarrollados como Japón, Corea del Sur o Australia, hasta países emergentes con gran potencial de crecimiento como China, India o el sudeste asiático, por lo que en conjunto ofrecen una diversidad de temáticas y estilos de inversión que contribuyen a dar equilibrio a una cartera diversificada. Así, la bolsa china ofrece exposición a compañías tecnológicas con unas valoraciones muy atractivas. Por su parte, las compañías japonesas están en un proceso de transformación de su cultura corporativa hacia una mayor eficiencia del capital y políticas centradas en el accionista, lo que favorecerá una revisión al alza de sus valoraciones. Australia, con sus compañías de recursos básicos, e India con su gran potencial de crecimiento a largo plazo complementan una oferta muy atractiva para los inversores.
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