Las rutas de la Córdoba literaria
El sello UCOPress publica una guía coordinada por Francisco Alemán Páez que a través de seis recorridos y 50 espacios explora el caudal literario de la ciudad, con textos de varios autores
Cincuenta escenarios, seis rutas, geografía literaria de una ciudad. El sello UCOPress, nueva apuesta editorial de la Universidad de Córdoba (antiguo Servicio de Publicaciones), lanza una obra que pretende, a partir de la propuesta de una serie de recorridos, "instantizar el instante", en expresión de su responsable, Francisco Alemán Páez. Es la Guía literaria de Córdoba, que invita a descubrir o redescubrir la ciudad a partir de un enfoque singular, su caudal literario, con las fotografías de Manuel Ángel Jiménez "y las esbeltas descripciones ideográficas de Matilde Cabello", junto a textos del propio Alemán, Bernd Dietz, Manuel Gahete, Francisco Gálvez, Pilar Sanabria y Desiderio Vaquerizo.
La "primera singularidad" de este libro, señala Alemán, "no es otra que su diferenciación. Y es que nace con una firme voluntad transitiva. En su interior suenan muchas cítaras que aguardan empáticamente la complicidad del lector amable, sensible o curioso. Desde su concepción inicial, fue gestado para entender de otro modo nuestro patrimonio capitalino y de acercarse a él empáticamente"; aspira a "abrir otras formas de comunicación con las que difundir dicho bagaje cultural y artístico entre la ciudadanía local y foránea". La obra "parte de una concepción integral, integradora y participativa del arte, haciéndolo más universal, tangible y accesible. Su contenido enhebra la creación fotográfica con la literaria, abriendo además ésta al lirismo novelado, el relato y, por ende, la poesía. Sus piezas son ventanas entreabiertas para que cada lector las empuje hasta donde desee llegar. Y por supuesto, guarda claves silenciosamente ideadas".
De los 50 emplazamientos, "la mayoría tienen un valor simbólico unánime pues deriva de su carácter histórico-monumental o su incuestionable belleza artística, pero también se han incluido pasajes, calles y plazas de alegoría abierta. La clave es suscitar la conciencia venturosa y aventurera de cada lector, haciéndole viajar por los lugares propuestos de la mano de las creaciones literarias elaboradas a tal fin".
La primera ruta recibe al viajero por tren y lo conduce hacia la avenida de América, la Diputación y la Torre de la Malmuerta, para seguir por la avenida de las Ollerías, el descenso por la Puerta del Colodro hacia el barrio de Santa Marina, la plaza de la Lagunilla, el busto de Manolete y las casas de paso de su infancia. Se camina luego hacia la plaza de los Condes de Priego, la iglesia de Santa Marina, el Palacio de Viana, la iglesia de San Rafael y la de San Lorenzo, o bien hacia la Cuesta del Bailío, la plaza de Capuchinos y el Cristo de los Faroles y la calle Osario.
La segunda arranca en la plaza de las Tendillas y transita por Rey Heredia, el Museo Arqueológico, las plazas de la Corredera y la Magdalena, Puerta Nueva, el Palacio de Orive y el Templo Romano, mientras que la tercera va de la plaza de la Trinidad (Escuela de Artes y Oficios) al Jardín Botánico, con escalas en la calle Judíos, Bodegas Guzmán, la Facultad de Filosofía y Letras, la Sinagoga, Campo Santo de los Mártires y el Alcázar de los Reyes Cristianos. La cuarta se desarrolla por la Judería, de la calle Deanes a Bodegas Campos (Mezquita-Catedral, calleja de las Flores, calle del Pañuelo, calle Cabezas, Museo Julio Romero de Torres) y la quinta es una ruta de ribera que comienza en el Puente Romano y explora los Sotos de la Albolafia, el Molino de San Antonio, la Torre de la Calahorra y el Campo de la Verdad. El último itinerario tiene tres escalas: Ermitas, Sandua y Medina Azahara.
Espacios de los que se extrae su potencial, su pulso, su historia, su médula, su misterio literarios. Planean sobre la obra los Paseos por Córdoba de Ramírez de Arellano. "Todos los textos del libro rezuman nostalgia, amor y devoción por los espacios descritos", afirma Alemán, que destaca que "la enérgica belleza de Córdoba y las sublimaciones de la ciudad han contado desde siempre con infinidad de creadores y creaciones, dando con ello lugar a un amplio y rico legado de manifestaciones artísticas. Entre todas, lo lírico y la literatura ocupan un lugar prevalente".
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