El festival Scarpia se reivindica como laboratorio de experiencias

El arte contemporáneo vuelve a protagonizar el verano en El Carpio con la duodécima edición del festival Scarpia, que ayer celebró su inauguración y que se desarrollará hasta el 20 de julio. Bajo el epígrafe Ecosistemas del arte y la sociedad, el encuentro da un paso más allá y se propone como laboratorio productor de ilusiones y experiencias en la realidad social de la localidad. Scarpia lanza una mirada hacia el trabajo colaborativo entre artistas y ciudadanos y la capacidad autónoma y colectiva de generar redes creativas en cadena.

Las jornadas incluyen este año cuatro talleres impartidos por una serie de artistas y colectivos emergentes comprometidos con las dinámicas interculturales, que suponen una reflexión artística sobre las diversas actitudes y didácticas del arte público. Así, el madrileño Miguel Guzmán, director de Espacio Islandia, pretende indagar en aspectos como la inmovilidad de las personas mayores en situación de dependencia y sus deseos a través de un taller multidisciplinar que contempla el dibujo, la cerámica y la acción. Por su parte, la mordaz mirada del vizcaíno Karmelo Bermejo cuestionará las incoherencias del mundo bajo el concepto de enajenación del arte, como un juego sutil y provocador que tiene por misión "la responsabilidad de ser profundamente irresponsable". El colectivo Basurama, nacido en la Escuela de Arquitectura de Madrid, impulsará las posibilidades creativas desde el reciclaje mediante la producción y el diseño de mobiliario utilitario en un parque periurbano en desuso. Y Boa Mistura, un colectivo de artistas urbanos nacido en Madrid, descubrirá el potencial expresivo del diseño y el arte del graffiti con el apoyo de lo público y lo político.

En el apartado expositivo, Noelia Centeno y Miguel Ángel Moreno Carretero comisarían en la Torre Garci Méndez Energía rural y arte contemporáneo, un recorrido por proyectos que trabajan en el desarrollo rural desde el arte, entre ellos Campo Adentro, una estrategia sobre territorios, geopolítica, cultura e identidad en las relaciones campo-ciudad en España; y por contraste, las intervenciones de tres proyectos nuevos en la provincia de Córdoba que interactúan con el desarrollo de lo social y la revitalización de lo rural: La Fresnedilla (Obejo), Z (Montalbán) y La Fragua (Belalcázar).

Fran Pérez Rus comisaría en el Museo de Historia de la localidad Estratos fluidos/Arte y tecnología en la sociedad actual. Y el Palacio Ducal alberga A través del espejo, comisariada por Ana Castillero y que permite una doble mirada fotográfica de carácter retrospectivo sobre la vida social del pueblo.