Cuando el cielo cambia de forma
Robe, el cantante de Extremoduro, ofrece en el Teatro de la Axerquía un concierto centrado en sus dos discos en solitario, 'Lo que aletea en nuestras cabezas' y 'Destrozares'
"Mira, el cielo nunca ha estado tan arriba", dice Robe en El cielo cambió de forma, que empieza con la proclama: "Doy la vida sin pensar, / no tengo adónde ir". Desde el Teatro de la Axerquía, en las horas de las primeras oscuridades el cielo es el relato de una mutación. Así lo percibió Robe, antes Robe Iniesta, que ofreció ayer el primer concierto en el teatro al aire libre del festival, que previamente había arrancado con Manuel Barrueco y el Beijing Guitar Duo en el Teatro Góngora. La última comparecencia del extremeño en Córdoba había sido en El Fontanar, en mayo de 2014, con Extremoduro.
Vino con su virtuosa banda y con esa fórmula que postula la combinación entre furia y poesía. Hoy al mundo renuncio, canta Robe: "Puede ser que sea que estoy harto de ver / lo que quiera que sea lo que vea. / Puede ser que esté cansado de mirar / y no ver más que anuncios de mierda". Temas ambos de Destrozares, canciones para el final de los tiempos, publicado a finales del pasado año, su segundo álbum fuera del emblemático grupo fundado en los 80 con el que lanzó obras como Agila o Canciones prohibidas.
Y se fueron sucediendo los temas, de Destrozares y de Lo que aletea en nuestras cabezas, bajo un cielo que al cierre de esta edición seguía estando muy arriba, adquiriendo formas inusuales, mientras Robe iba diciendo sus versos. Por ser un pervertido: "Pensaba que todo era amor, / pensaba que solo era amor, / lo tengo merecido / por ser un pervertido". Había un público que creció con las estrofas de Extremoduro y otra parte de robeófilos más jóvenes que se han sumado en los últimos años y han ido rebobinando hasta encontrarse con la singular obra de la banda. Uno de los mejores momentos de Destrozares es La canción más triste: "Ya nunca más / volverás a sentarte a mirar / el color de los días... / ni la vida". Con De manera urgente y Puta humanidad, entre otras, fueron el artista y sus músicos tejiendo sus alianzas con la noche bajo ese cielo negro pero secretamente cambiante, y dejando el escenario regado de sensaciones y acordes para los que vendrán en los próximos días, Ana Popovic, Imelda May, Amaral, Michel Camilo & Tomatito y Pasión Vega & Noa, entre otros.
No hay comentarios