Antonio Mercero presenta su obra "más personal" en la Feria del Libro de Córdoba: "Me meto directamente en el jardín de mi familia"

De un hallazgo en Wallapop surgió la última novela de Antonio Mercero (Madrid, 1969). Está lloviendo y Te quiero hace un viaje por cuatro generaciones de una misma familia en el siglo XX con un hilo conductor muy particular: un reloj de pared del siglo XIX que tiene nombre, El Incomprendido. Es ese reloj el que precisamente el escritor encontró en esta conocida app de compra-venta de artículos de segunda mano que había realizado su tatarabuelo lo que le inspiró a soltar "esa chispa creativa que un escritor necesita para sentarse a escribir sobre algo".

"De pronto me apetece imaginarme a mí en el relato comprando ese reloj y regalándoselo a mi hermano. Me imagino a mi madre sufriendo un infarto, que es lo que pasa en la novela al ver el reloj, y dentro del reloj aparece un mensaje que dice Está lloviendo y te quiero. Y ahí el personaje de la novela, que es Paula Yarza -que sería yo-, queda intrigada y se pone a investigar qué pasa, si habrá un secreto familiar guardado que puede cambiar la mirada sobre su familia y sobre su propia existencia". Así ha explicado Antonio Mercero su última obra en la Feria del libro de Córdoba en la presentación que ha sido moderada por la redactora de el Día de Córdoba, Ángela Alba.

Está lloviendo y Te quiero traslada al lector a la Lasarte (Gipuzkoa) de 1916 para conocer a la familia Yarza a lo largo de cuatro generaciones a través de las que Antonio Mercero explica la historia del "negrísimo siglo XX español con el hilo conductor del reloj de pared que va pasando de generación en generación". Una novela con parte de ficción muy cercana a la vida familiar del autor madrileño, que ha tenido que realizar una amplia labor de investigación en Lasarte, el pueblo de su padre en el que "transcurre la mayor parte de la acción".

"Lasarte en 1916, no era ni siquiera un pueblo, era una aldea de Gipuzkoa Allí he vivido de toda la familia, de la vida de mi padre y de sus gentes, sus antepasados, sus lugares y el Valle de Loria que luego vio crecer. Juego con algunas cosas reales y otras inventadas, aunque la mayoría de la trama es muy real por los personajes y lo que ocurre a nivel histórico", ha explicado Antonio Mercero, a quien, sin embargo, la documentación no le ha parecido "difícil", más bien lo complicado es "el tiempo que hay que dedicarle, porque hay que leer sobre la Guerra Civil, la República, sobre la represión en el franquismo, el hambre en postguerra y cómo era la vida en 1916". Lo difícil, de hecho, es "meterse en los personajes, en las emociones de cada uno y conseguir que el relato interese".

En su última obra, Antonio Mercero cuenta la transformación de Lasarte de ser "un lugar de aldeanos y burros" a "un lugar de reunión de millonarios y de la realeza porque el rey Hermoso tiene allí sus caballos" tras la construcción de un hipódromo internacional y cómo el relojero de Lasarte intenta adaptarse a la nueva clientela, así como el resto de aldeanos; además del avance hasta los años 70 y "el mundo de los cineclubs y de las tertulias de cine convertidas por culpa de la política, que se hablaba en todas partes".

Toda esta mezcla de temas históricos ha permitido a Antonio Mercero crear su obra más personal: "Es mi obra más personal porque me meto directamente en el jardín de mi familia, que eso siempre es un viaje peligroso y tiene mucho de viaje emocional y de homenaje a la figura de mi padre. Todo lo que yo le invento del personaje, su destino y su trama, es ficción, pero lo he escrito en clave de homenaje íntimo y lo siento así", ha destacado el escritor y guionista, muy popular también por ser uno de los tres integrantes del seudónimo Carmen Mola (junto a Jorge Díaz y Agustín Martínez), con el que ganaron el Premio Planeta en 2021 con La Bestia.

Antonio Mercero ha publicado otras obras como La cuarta muerte y La vida desatenta. Bajo el seudónimo de Carmen Mola, "es todo muy distinto en la propia creación de la novela". Mientras que en Está Lloviendo y Te quiero el madrileño ha regresado "a la soledad del escritor en su torreón", junto a sus dos compañeros protagoniza "reuniones muy divertidas con risas y un trabajo muy distinto" que Antonio Mercero asemeja "a una reunión de equipo de cineastas". "También se disfruta de la creación en soledad y de tomar tú todas las decisiones. Aunque ser el responsable de las 500 decisiones que hay que tomar en una novela es embriagador, la libertad que te da me gusta. Pero es muy distinto. Lo que he echado mucho de menos es la promoción, porque en los viajes de promoción los tres lo pasamos muy bien, pero me gustan las dos cosas", ha apuntado un Antonio Mercero muy aclamado en su posterior firma de libros en una de las últimas jornadas de la Feria del Libro de Córdoba.