Vimcorsa dedica una exposición a la fotografía moderna de Horacio Coppola

La sala acoge hasta el 21 de junio una muestra con más de un centenar de instantáneas y cuatro vídeos del fotógrafo que llevó los lenguajes artísticos de la Nueva Objetividad hasta Argentina

Sección dedicada al 400 aniversario de la fundación de Buenos Aires expuesta en la Sala Vimcorsa.
Sección dedicada al 400 aniversario de la fundación de Buenos Aires expuesta en la Sala Vimcorsa.
Ángela Alba Córdoba

22 de abril 2016 - 05:00

El predominio de la geometría, la abstracción, los contrapicados y los contrastes de luces y sombras en la fotografía de la Nueva Objetividad se asoman a la Sala Vimcorsa en la exposición Horacio Coppola, que exhibe 108 instantáneas y cuatro vídeos del artista argentino procedentes de los fondos de la Fundación Telefónica. La muestra recoge la esencia del mejor representante de la fotografía argentina del siglo XX, un artista que conoció las vanguardias que surgieron en Europa en los años 30 del siglo pasado durante su estancia en Berlín y en París.

La directora de Arte y Tecnología de la Fundación Telefónica, Laura Fernández Ordaz, señaló ayer en la presentación de la exposición que Horacio Coppola (1906-2012) es "el fotógrafo moderno por excelencia" de Latinoamérica y resaltó la importancia que tuvo para su obra el tiempo que vivió en Alemania, donde absorbió los postulados de los nuevos lenguajes en un momento en el que nacía el diseño industrial y el diseño gráfico.

Fernández Ordaz añadió que en la capital porteña fundó el primer cine club a principios de los años 30 y entre sus amistades figuraban intelectuales como Xul Solar, Victoria Ocampo, Jorge Luis Borges o el pintor Alfredo Guttero, quien le animó a irse a Europa.

En 1932 se matriculó en la Bauhaus, donde recibió clases con Walter Peterhans y conoció a su primera mujer, Grete Stern. Tras el cierre de la escuela en 1933, la pareja viajó a París, donde el director de Cahiers d'art, Christian Zervos, le encargó su primer libro fotográfico; L'art de la Mesopotamie. Para ello fotografió el arte sumerio del Louvre y del British Museum.

Al tiempo, regresaron a Argentina, donde le llegó el encargo del intendente Mariano de Vedia y Mitre: registrar Buenos Aires en el cuarto centenario de su fundación. Así surge el libro Buenos Aires, 1936. Visión fotográfica, con prólogo y comentarios de Alberto Prebisch. La obra pasó a formar parte de una memoria visual mítica de la fotografía, a la altura de París de nuit de Brassaï, del Stockholm de Andreas Feininger o de los perfiles londinenses de Bill Brandt.

La exposición que acoge Vimcorsa exhibe precisamente una selección de esas imágenes argentinas. En ellas el vértigo de la ciudad moderna se desdobla en las visiones múltiples de Buenos Aires y queda registrada por la cámara de Coppola. En sus instantáneas retrata la ciudad, la efervescencia de la masa de gente por sus calles, el ambiente comercial, el cielo, el puerto o los medios de transporte, entre otros. Además, el artista dedicó una serie a la construcción del Obelisco, convirtiéndolo así en elemento artístico fotográfico y reflejándolo en un cortometraje.

En esta línea, la muestra de la Sala Vimcorsa se divide en una primera parte dedicada al paso por la Bauhaus de Coppola, una segunda a las imágenes tomadas con motivo del 400 aniversario de la fundación de Buenos Aires y una tercera versa sobre la construcción del Obelisco.

Además de ese cortometraje, en Vimcorsa se proyectan los vídeos Traum (El sueño), en el que contó con la colaboración en los papeles protagonistas de Ellen Rosenberg y Walter Auerbach, ambos compañeros y estudiantes como él en la Bauhaus; Ponts des arts (Un dique del Sena), en el que efectúa un recorrido que abarca el puente, la vida de la gente humilde que transita y habita el dique, sin solución de continuidad; y A sunday in Hampstead heath (Un domingo en Hampstead Heath), considerado su primer documental y rodado en Inglaterra en 1935 para reflejar su situación social.

Horacio Coppola, que murió a los 106 años, mantuvo una actividad incesante. Dedicó buena parte de su tiempo a la investigación, la incorporación del color en sus fotografías (realizando distintas series documentales junto con su segunda mujer, Raquel Palomeque), la realización de la antología fotográfica Imagema y el desarrolló una importante actividad pedagógica.

Su obra está recogida en los libros Buenos Aires 1936. Visión Fotográfica, Esculturas de Antônio Francisco Lisboa, o Aleijadinho, Cuarenta años de fotografía, Imagema. Antología fotográfica 1927-1994, El Buenos Aires de Horacio Coppola, Buenos Aires años 30, Visoes de Buenos Aires, Horacio Coppola. Fotografía y Los Viajes.

A finales de 1996, el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) le organizó su primera retrospectiva en un museo europeo, centrada en los años 20 y 30.

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