Tomatito y El Cigala encienden su llama flamenca en la Axerquía

El Festival de la Guitarra se abre esta noche al flamenco de la mano del tocaor almeriense José Fernández Tomatito y el cantaor madrileño Diego El Cigala, que ofrecerán en el Teatro de la Axerquía su espectáculo 40 kilos de arte. Estos dos artistas, dos pesos pesados del flamenco más actual, vuelven a encontrase más de 15 años después de la desaparición del ilustre y genial José Monge Cruz Camarón de la Isla, quien dejó una profunda huella en la historia de su arte y los unió por primera vez en La leyenda del tiempo. Desde entonces han coincidido en varias ocasiones y otra vez prometen arrasar con sus actuaciones de esta gira, de la que saldrá un disco en directo.

El público que se acerque al coliseo vivirá una singular noche con dos de los mejores representantes del flamenco de la actualidad. Hay muchas cosas en común entre los dos, ya que si uno estuvo muy vinculado a Camarón porque lo acompañó durante muchos años, el otro siempre ha sido considerado uno de sus sucesores. El escenario se vestirá de gala para acoger a estas figuras, que acercarán el flamenco a otros estilos en una combinación de la raíz del cante jondo y la innovación a la hora de reinterpretar piezas del jazz, el rock o el blues.

De José Fernández Torres Tomatito (Almería, 1958), los entendidos destacan su toque gitano, sonoro y brillante, su capacidad de comunicación con el público. Seguidor de la escuela de Paco de Lucía, su carrera artística está marcada por la etapa que compartió con José Monge, al que acompañó durante los últimos 18 años de la vida del cantaor en recitales y festivales flamencos de España y el extranjero, y con quien completó una extensa discografía en esta etapa de excepcional simbiosis artística.

A la muerte del genial cantaor, en 1992 Tomatito inicia una fulgurante carrera en solitario en la que se ha forjado un lugar entre las primeras figuras de su arte gracias a una trayectoria fiel a la tradición del flamenco y a la vez abierta a otros ritmos y músicas. El guitarrista almeriense ha sabido rechazar restricciones culturales impuestas para enriquecer su obra con matices armónicos y rítmicos adquiridos tras conocer el jazz, el rock, el blues, la bossa y otros formatos musicales. De ahí sus colaboraciones con Elton John, Michel Camilo, Carlos Cano, Frank Sinatra, George Benson, Mecano o Joan Albert Amargós, que le han empujado a afianzarse como un músico autodidacta de espíritu indomable poseedor de una creatividad y un carisma abiertos a nuevas perspectivas.

Por su parte, Ramón Jiménez Salazar -nombre de pila de Diego El Cigala-, es oriundo del castizo Rastro madrileño. Su calidad excepcional como artista es la que le induce a profundizar en experiencias profesionales fuera del ámbito estrictamente flamenco y trabajar junto con ilustres compañeros de reconocimiento internacional. El Cigala está dotado de una presencia escénica cautivadora, avalada por su larga trayectoria artística, que certifica su pertenencia a la élite de la música española.

Esta noche a partir de las 23:30 Tomatito y El Cigala demostrarán en su espectáculo 40 kilos de arte cómo han sabido conjugar la fidelidad a su herencia racial con su capacidad para traspasar barreras musicales para enriquecer su arte con matices distintos armónicos y rítmicos.