Ninette o París

Crítica de Teatro

Puesta en escena de 'Ninette y un señor de Murcia'.
Puesta en escena de 'Ninette y un señor de Murcia'.

NINETTE Y UN SEÑOR DE MURCIA DE MIGUEL MIHURA

Reparto: Jorge Basanta, Natalia Sánchez, Miguel Rellán, Julieta Serrano y Javier Mora. Dirección: César Oliva. Producción: La Ruta Teatro y Teatro Circo de Murcia. Fecha: Sábado 5 de marzo. Lugar: Gran Teatro. Lleno.

Qué mejor opción para conciliar público y taquilla que sacar de la estantería un texto de Miguel Mihura y llevarlo al escenario. Ninette y un señor de Murcia ha sido en esta ocasión la obra responsable de agotar el pasado sábado las entradas del Gran Teatro.

Haciendo uso de su característico y proverbial sentido del humor, Mihura nos presenta a Andrés, un joven murciano que encandilado por las historias de su amigo Armando decide correrse una juerga por todo alto y visitar París, o mejor dicho, las habitaciones de un piso de París pues, salvando la estación y el taxi que lo trajo hasta allí, ese será el único lugar que conocerá de la ciudad de la luz.

El motivo de su reclusión permanente no será otro que Ninette, la preciosa hija de sus huéspedes Madame Bernarda y Monsieur Pier, un matrimonio español exiliado tras la guerra civil. Desde el primer día hasta el último de su prolongada estancia Andrés se debatirá en un conflicto permanente que le obliga a elegir entre disfrutar las maravillas de la capital francesa o quedarse en casa en compañía de su primorosa amante, un pulso que por una razón u otra siempre ganará Ninette. Sin querer pero queriendo, Andrés se dejará llevar a un destino sorprendente e impensable para este vendedor de catecismos chapado a la antigua y bastante mojigato.

Cesar Oliva dirige un montaje limpio, privilegiando la palabra y dejando fluir la acción con naturalidad sin caer en malabarismos propios de quienes pretenden reinventar la obra o dotarla de un atractivo añadido. Cuando un texto es bueno y el número de personajes se ajustan al presupuesto no necesita más. Lo mejor que se puede hacer es aplicar la sencillez, como es el caso de esta producción. Otro gran acierto ha sido el reparto que interpreta: Jorge Basanta nos regala una interpretación completa de matices gestuales y Natalia Sánchez sorprende de manera grata presentando una Ninette tan cándida como decidida. El resto del elenco que dan la réplica a la pareja de protagonistas multiplican el efecto de cada acción con sus magníficas intervenciones: Javier Mora divierte con su tacañería y junto a Miguel Rellán y Julieta Serrano brindan una lección magistral de saber estar sobre las tablas.

Con esos personajes variopintos que viven situaciones absurdas Mihura hizo un retrato de los permanentes contrastes y ambigüedades que había en la sociedad española de su época, detalles que en cierto modo aun permanecen en esencia pese a los tiempos que corren. Y es que nada gusta más que escuchar en la calle cómo se debate entre blanco y negro mientras en nuestra casa actuamos como grises.

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