Medina Azahara es uno de los primeros grupos de música que se animan a dar un concierto presencial y que, debido al aforo reducido y a las normas de distanciamiento que hay que seguir en esta nueva normalidad, también se emitirá en directo para que todos los fans de la banda cordobesa puedan seguirlo a través de internet.

"El próximo 28 de junio haremos un concierto en streaming desde Córdoba para el mundo", manifiesta el mítico grupo de rock. La actuación será en la Sala M100, situada en el polígono de Chinales de Córdoba, y el inicio está previsto a las 21:30 hora española.

"Muy a nuestro pesar, por motivos del covid-19, nos es imposible poder veros, pero no quiere decir que vosotros no nos podáis ver a nosotros desde el sofá de vuestra casa gracias a las nuevas tecnología", explica Medina Azahara a su legión de seguidores, repartidos por muchos países del mundo, pero en especial en España y Latinoamérica, donde son muy queridos.

Las entradas se podrán adquirir a través de la plataforma Stageroom (pinche en este enlace para acceder a la compra) a varios precios. Por ejemplo, la entrada normal cuesta seis euros y con ella solo se podrá conectar un dispositivo al streaming. La familiar tiene un precio de ocho euros y permite la conexión de tres dispositivos como máximo, mientras que la VIP cuesta diez euros y, además del acceso de tres dispositivos, posibilita conectarse a un chat en vivo con el grupo.

Por otra parte, en la sala habrá un aforo muy limitado (menos de 100 personas), según las normas vigentes. Además, será imprescindible el uso de mascarilla para acceder al recinto y dentro se guardará la distancia de seguridad. Las entradas cuestan 22,18 euros y se pueden adquirir desde la plataforma Eventbrite (pinche aquí para comprar).

Los grupos de música están adaptándose a las restricciones impuestas para controlar la pandemia del coronavirus y para ello han tenido que idear nuevas fórmulas. Al ser los aforos mucho más reducidos, ha surgido la iniciativa del directo a través de internet que, además de dar la oportunidad de seguir en contacto con el público, ayuda económicamente a que los músicos, un sector muy afectado por la crisis, puedan obtener algún tipo de ingreso y salir adelante.