Hinojosa descubre el arte de Sorolla y sus contemporáneos

El pintor de la luz, Joaquín Sorolla, protagoniza una exposición itinerante de los fondos del Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana que desde ayer hasta el 10 de junio tiene como sede el Museo Etnológico de Hinojosa del Duque. Sesenta obras, 17 de ellas del valenciano, integran una muestra que propone un recorrido por la pintura española de finales del siglo XIX y principios del XX.

Sorolla y sus contemporáneos llega a Hinojosa de la mano del Ayuntamiento de la localidad, la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí, la oficina Córdoba 2016 y la Diputación. La exposición refleja las diferencias entre las dos corrientes pictóricas predominantes en la España de la época: el realismo moderno y optimista de Sorolla y el simbolismo reflexivo y crítico de Ignacio Zuloaga. Anglada Camarasa, Manuel Benedito, Gonzalo Bilbao, Roberto Domingo, Martínez Cubells, José y Bartolomé Mongrell, Víctor Moya, Ignacio y José Pinazo, Santiago Rusiñol y Julio Vila Prades también están representados en esta antológica.

En los años finales del siglo XIX y los iniciales del XX, la pintura europea experimentó un proceso de crisis que algunos estudiosos interpretan como el epílogo de los principios naturalistas establecidos en el Renacimiento y el prólogo a las rupturas vanguardistas de la nueva centuria. En el caso de España, la producción pictórica estuvo dominada por dos figuras relevantes: Sorolla y Zuloaga, dos de los pintores con mayor repercusión fuera de las fronteras españolas y que representaron dos polos estéticos opuestos. De Sorolla se exhiben en Hinojosa obras de carácter popular, algunas de ellas pertenecientes a la serie de los niños en la playa, mientras que de Zuloaga el espectador puede contemplar algunos interesantes retratos femeninos, el de un anciano banderillero y el del pintor Pablo Uranga.

Destacan también en la exposición un paisaje de evocación romántica del sevillano Emilio Sánchez Perrier y la Muchacha en velo del valenciano Julio Vila Prades.

Sorolla y sus contemporáneos se remite al panorama pictórico del cambio de siglo en España a partir de la colección de arte español del museo cubano, una extensa pinacoteca creada a partir de las cesiones de coleccionistas privados e institucionales a lo largo de las últimas décadas. El centro tiene sus orígenes en las colecciones reunidas a partir de 1873 por Emilio Herrera Moral, que, en principio, tuvieron como sede el Centro Asturiano. Donaciones particulares y de la Academia de San Alejandro fueron conformando un destacado conjunto artístico que adquirió la naturaleza de museo en 1913. Más tarde se unió a él gran parte de las obras que la burguesía prerrevolucionaria había adquirido. El museo, que posee una nueva sede desde 2001, cuenta actualmente con una colección de carácter enciclopédico que abarca arqueología, bellas artes y etnografía.

En el de La Habana, como en otros museos americanos, la presencia de arte español realizado en torno a 1900 es notable. De hecho, algunos de estos centros conservan obras de artistas escasamente representados hoy en las pinacotecas españolas.

La exposición Sorolla y sus contemporáneos es visitable de 11:00 a 14:00 y de 18:00 a 22:00. Los grupos pueden solicitar su visita en el teléfono 957141056.