'Fuenteovejuna' llega a Almagro

Los vecinos de Fuente Obejuna inaugurarán el próximo 2 de julio el Festival de Teatro Clásico de Almagro con la obra de Lope de Vega, que representarán en la Plaza Mayor de la localidad manchega con entrada libre. De esta forma, el espectáculo, que estará dirigido por Ángel Luis Martín Fernández, será el punto de partida para esta clásica cita estival, que en esta edición contará con 52 compañías (39 de ellas españolas), 93 funciones y 53 espectáculos. La República de Corea será el país invitado y entre los directores participantes estarán Tim Robbins, Andrés Lima o Blanca Portillo.

Fuenteovejuna se representará tras la entrega del décimo quinto Premio Corral de Comedias al actor onubense José Luis Gómez; y tras ella la programación incluye la puesta en escena, en el Hospital de San Juan, de Enrique VIII y la cisma de Inglaterra, de Calderón de la Barca, a cargo de la Compañía Nacional de Teatro Clásico y protagonizada por Sergio Peris-Mencheta.

De esta forma, Almagro reconoce la labor de los vecinos en la representación de Fuenteovejuna, que se realiza de forma tradicional en la plaza Lope de Vega desde 1992 sin una periodicidad fija. Además, el festival recupera una obra cuyo mensaje tiene plena actualidad. En 1610, Lope de Vega escribió esta historia que durante siglos ha servido para ilustrar esa idea de que el pueblo unido jamás será vencido: frente a los abusos de poder del Comendador de Fuenteovejuna, los vecinos del pueblo se organizan para luchar por lo que consideran justo. Se trata de una idea que conecta con la actualidad a través de los movimientos ciudadanos que se han constituido en partidos o agrupaciones para desbancar del poder a los que siempre lo han ostentado y abusado de él. Tras las últimas elecciones municipales y autonómicas, en muchos casos lo han conseguido y los ciudadanos ya se han colado en las instituciones, acabando así con el bipartidismo.

En 2003 la representación de la obra estaba programada para el verano y también llamada a participar en el Festival de Teatro de Almagro, pero fue suspendida inesperadamente tras un cambio de gobierno en el municipio. El Ayuntamiento alegó entonces problemas presupuestarios, aunque sí colaboró en su realización para la edición del año siguiente.

Al respecto, la directora del Festival de Teatro Clásico de Almagro, Natalia Menéndez, reconoció que en esta edición "hemos cumplido un sueño que venimos persiguiendo hace años" y la representación de este Fuenteovejuna "para Almagro es un auténtico lujo".

La primera vez que esta célebre obra del Siglo de Oro español fue representada en Fuente Obejuna, en 1935, coincidiendo con el tricentenario de la muerte de Lope de Vega, su puesta en escena corrió a cargo de la Compañía de Enrique Borras y Margarita Xirgu. Las dos representaciones siguientes, en 1954 y 1962, también fueron realizadas por compañías y actores ajenos al pueblo, aunque los naturales de la villa actuaron como figurantes. La obra no volvió a la plaza central del municipio hasta 1992, y lo hizo con un cambio fundamental: la directora de la obra, María de la Paz Ballesteros, propuso que esta vez fueran los propios habitantes de Fuente Obejuna quienes se metieran en la piel de sus valientes antepasados. Desde entonces, y bajo la dirección de profesionales del mundo del teatro, el pueblo ha interpretado el papel del pueblo en lo que se ha convertido en una tradición. A la edición de 1992 siguieron las de 1994, 1997, 2000, 2004, 2006, 2009 -cuando hubo un conflicto con la SGAE que hizo peligrar el montaje- y 2013.

En ellas, la plaza Lope de Vega se convierte en un gran escenario en el que no sólo participan unas trescientas personas, sino que también salen a escena animales como caballos, gallinas, corderos, patos o conejos. Esto hace de la obra un gran espectáculo que la semana que viene llegará hasta la plaza Mayor de Almagro, aunque con un elenco algo más reducido, con unas 150 personas.

Fue el Ayuntamiento de la localidad manchega el que se puso en contacto con el de Fuente Obejuna para invitarlo a participar en el festival de teatro clásico, con el aliciente de que la escenografía, decorados, montajes, iluminación, sonido, alojamientos y demás gastos ocasionados correrían a cargo de la organización. Por lo tanto, el municipio del Alto Guadiato sólo deberá aportar a los actores y figurantes, además del vestuario e instrumentos como estandartes y armas que se utilizan en cada función de la obra.