El Ballet Flamenco de Andalucía revive el 'Llanto' lorquiano por Sánchez Mejías

El Ballet Flamenco de Andalucía presenta esta noche (21:00) en el Gran Teatro Llanto por Ignacio Sánchez Mejías, un espectáculo que coreografía la vida y muerte del torero y su amistad con Federico García Lorca. El montaje cierra una nueva edición de Flamenco viene del Sur, ciclo promovido por el Instituto Andaluz del Flamenco que ha estado presente en Córdoba en los últimos meses con tres espectáculos. Las entradas valen de 7 a 18 euros.

Tras el estreno de Metáfora, el Ballet Flamenco de Andalucía decidió recuperar su Llanto por Ignacio Sánchez Mejías, una coreografía que inicialmente formaba parte de aquel montaje y que según el director de la compañía, Rubén Olmo, tiene la "suficiente fuerza y carácter" para constituir por sí sola un espectáculo, una vez ampliada. Se trata de una propuesta escénica rica en matices musicales en la que, utilizando la célebre elegía de García Lorca con la danza como hilo conductor, se profundiza en el flamenco, con guiños contemporáneos.

La pieza es un homenaje a aquel andaluz "tan claro, tan rico de aventuras", un matador de toros que, como destaca el Instituto Andaluz del Flamenco, también fue vividor y dramaturgo, sportman, amante de otro mito llamado La Argentinita y mecenas y amigo de algunos de los mejores escritores de su época, entre ellos Lorca. El espectáculo se divide en dos partes bien diferenciadas que representan la vida y la muerte: primero, el espectador asiste a la recreación de una fiesta en la finca del torero, una celebración que se presenta como un contraluz de la tragedia que se desencadenaría apenas dos años después, cuando una cogida mortal siega la vida del diestro.

Sobre aquellos versos a la muerte de su amigo que escribió el autor del Romancero gitano, el Ballet Flamenco de Andalucía, de nuevo con Olmo como director y coreógrafo, emprende un largo viaje cuya banda sonora lleva aromas de tangos granadinos o de El amor brujo de Manuel de Falla. Un viaje que se sustenta en una música original de Pedro Sierra interpretada por siete músicos en directo. El elenco artístico -integrado por 11 bailarinas y bailarines- tiene a Patricia Guerrero y Eduardo Leal como solistas.

La crítica ha destacado que la cuidada puesta en escena, con efectos vanguardistas y perfectamente introducidos, y una elección musical acertada en todos sus ámbitos da consistencia a la obra. En el pasaje Corrida y muerte, la compañía representa a un toro metafórico que se desplaza con un cuerpo de baile de casi diez personas con gran virulencia y desparpajo. Una de las ideas más llamativas del espectáculo.

El Ballet Flamenco de Andalucía es el máximo representante institucional del arte jondo en la comunidad. Ha ejercido de embajador del flamenco desde su creación en 1994. En este tiempo ha pasado por escenarios de todo el mundo y formado parte de las agendas culturales de países como Estados Unidos, Argentina, Cuba, Francia, Italia, Hungría, Suiza o Japón. Recibió el Premio Nacional de Coreografía por el montaje dirigido por María Pagés El perro andaluz y ha sido candidato en diversas ediciones de los premios Max. Además, la compañía es una inagotable cantera de talentos.