Antología flamenca para bajañí, flauta y saxo

Crítica de flamenco cine

Jorge Pardo y Pepe Habichuela, en un momento de su concierto.
Baldomero Pardo

04 de julio 2015 - 05:00

FLAMENCO UNIVERSAL

Guitarra: Pepe Habichuela. Flauta y saxo: Jorge Pardo. Segunda guitarra: Josemi Carmona. Baile: Paloma Fantova. Contrabajo: Pablo Báez. Percusión: Bandolero. Fecha: jueves 2 de julio. Lugar: Gran Teatro. Casi lleno.

Del discurrir de la carrera del guitarrista granadino José Antonio Carmona Pepe Habichuela, cualquier aficionado que se precie sabe que desde hace mucho tiempo es una trayectoria artística de fondo, con un bagaje profesional envidiable a cuenta de una disciplinada perseverancia, y cómo y junto a quiénes la ha desarrollado. Primero y por imposición lógica y circunstancial, junto a los muchos artistas flamencos más cercanos, es decir, en su tierra natal y con los suyos, familiares o no, donde fue adquiriendo oficio; cosa que desde su más tierna infancia comenzó a asimilar. Y por ello, ávido por crecer como artista y sintiéndose llamado a ensanchar su horizonte profesional lo más cerca posible de los grandes de la sonanta, estaba su hermano Juan, elegido entre los mejores para exhibirse en los tablaos madrileños a partir de aquellos míticos sesenta del siglo pasado. Y tras él se fue.

Así, el periplo para Pepe Habichuela comenzaría unos años después, prodigándose por aquellos pagos en el acompañamiento al cante y baile de nombres consagrados y de otros jóvenes como él que algunos ya veían como figuras de este arte. Entre éstos, cómo no, estarían Fosforito, Morente, Mario Maya, El Güito y, desde luego a no tardar, Camarón, y otros importantes. A continuación vendrían unos tiempos de vorágine, luciendo su estrella en toda clase de festivales flamencos al servicio del arte que amaba, aguardando a que llegara su momento para prestarle atención al concierto como solista, y después definitivamente hacerlo con frecuencia, como la anterior vez que pasó por Córdoba hace tres años.

Por lo que volver a encontrarse con el tocaor el pasado jueves en el Gran Teatro, en esta edición del Festival de la Guitarra, y junto a Jorge Pardo con sus flautas y saxos, así como el resto de músicos a propósito del concierto Flamenco Universal, resultó una feliz ocasión que estamos celebrando. Consiguieron captar nuestra disposición con atinado repertorio, donde unos y otros sin alardes inútiles y sí muchas virtudes artísticas, denotaron que las piezas flamencas elegidas permitían la simbiosis y que la fama que les precede les hace justicia. Del excepcional músico con los instrumentos de viento tenemos amplias referencias desde las dos últimas décadas del siglo XX en la discografía de Paco de Lucía y sus globalizados conciertos. Su descubierta afición al flamenco le llevaría a reunirse en múltiples y acoplados recitales, así como con astros del jazz, fusionando éste con el jondo, y difundiéndolo sin complejos en el ámbito universal.

De manera que, algo de lo antedicho, en la sesión del jueves es lo que Habichuela y Pardo, junto a los suyos, nos presentaron; acometiendo palos el granadino por soleá, aires gaditanos y seguiriya, y tras éstos el madrileño incorporándose a escena, por minera y cartagenera, y junto al guitarrista, la Danza del fuego, Bolero de Ravel, y con todos El Faro, en jam session, y acto seguido sin solución de continuidad en soleá por bulerías, bulerías, zambra Niña de fuego, por tangos, acordándose de Morente, y para el fin de fiesta, invitando a Lin Cortés y dos de los suyos que estaban en la sala, y así clausurar con una larga tanda de bulerías de Cádiz. Todo, mejorando de menos a más, adornado con notable técnica y estética, con un pulgar de vértigo Habichuela, gusto en trémolos y alzapúas, y de la armonía y la musicalidad de un elegante Pardo, y siempre a más con el baile de la joven malagueña Paloma Fantova, para satisfacción del público que los acogía volcado en aplausos durante toda la sesión, y cuando no querían que se retiraran.

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