Cuando se cumplen 30 años de la inauguración de la planta de Martorell (Barcelona), Seat anuncia una inversión de 3.000 millones de euros en ella. Esto permitirá transformar la planta para adaptarla al trabajo con vehículos eléctricos en diferentes áreas y cubriendo diferentes áreas: investigación y desarrollo, producción y logística, área comercial y de recursos humanos, así como organización.

El proyecto estrella de esta transformación es el liderazgo de Seat para el grupo Volkswagen en el proyecto del Small BEV. En palabras del presidente de Seat y Cupra, Wayne Griffiths, “a lo largo de los últimos 30 años, Seat ha generado empleo y ha impulsado el crecimiento industrial del país, y hay más planes para el futuro. Tenemos la ambición de producir vehículos eléctricos “made in Spain” a partir de 2025 y, dentro de esta transformación, Martorell también fabricará el Cupra UrbanRebel. Gracias a este proyecto, el más importante de nuestra compañía en los próximos años, nuestros empleados y la fábrica iniciarán una nueva era”.

La metamorfosis de Martorell va a abarcar prácticamente todas las áreas con el objetivo de producir coches eléctricos de manera más eficaz y eficiente.

Esta transformación está enmarcada en el proyecto Future: Fast Forward e, incluye, también la electrificación de la planta de Volkswagen en Landaben (Navarra), así como la instalación de la factoría de Sagunto (Valencia) para la producción de baterías o de una red de proveedores. Se prevé que este proyecto tenga un impacto en la economía española por valor de 21.000 millones de euros.

La de Martorell es hoy la instalación de mayores dimensiones del grupo Volkswagen en España.

Con esta inversión Martorell será más eficiente y se convertirá en una fábrica inteligente gracias a herramientas de datos e inteligencia empresarial, realidad virtual o el uso de big data para mejorar los procesos y monitorizarlos en tiempo real.

En la actualidad, 12.000 empleados trabajan en la fábrica y sede central de Seat. La planta ocupa una superficie de 2,8 millones de m2, lo que equivale a 400 campos de fútbol.

La sede de Cupra en Martorell es, junto al laboratorio de baterías, una de las últimas instalaciones incorporadas a la planta barcelonesa.

Fue inaugurada en 1993 tras 34 meses de obras e inició su actividad con una inversión en pesetas equivalente a 1.470 millones de euros. Anteriormente, los coches de Seat se fabricaban en las instalaciones de Zona Franca de Barcelona, a sólo 30 kilómetros; y, desde 1993, se han producido 12 millones de vehículos de 45 modelos que se han comercializado en 70 países del mundo, con un 83 por ciento de la producción destinada a la exportación.

Los procesos organizativos, así como la gestión de personal, también están entre los objetivos marcados por Seat para esta nueva era basada en la electrificación de sus coches.

Su primer coche fue la segunda generación del Ibiza, a ritmo de 1.500 coches diarios; mientras que el más fabricado actualmente es el Cupra Formentor. Además de coches comercializados como Seat y Cupra, Martorell también ha producido modelos para Audi, como el Q3 y, en la actualidad, el A1.