Aunque son una de las citas más esperadas cada año por los cordobeses, las Cruces de Mayo no son alegría y jolgorio para todo el mundo. De hecho, para los vecinos del Casco Histórico de Córdoba se han convertido en todo lo contrario. Y es que la Asociación de Vecinos la Axerquía cataloga de "insoportable" el vivir cerca de donde se celebra una cruz y, además, denuncia el "descontrol" que se genera en la zona durante las fiestas.

"El Casco Histórico de Córdoba está siendo machacado, desde San Pedro hasta la plaza de la Compañía", lamenta Rafael López, el presidente de esta asociación vecinal que denuncia que "los vómitos y los ríos de orines" de los ciudadanos han ensuciado esta zona de la ciudad durante los cinco días en los que se celebran las Cruces de Mayo. "Un matrimonio de la calle Antonio del Castillo ha estado todas las noches sentado en la puerta de su casa para evitar que las personas fuesen allí a orinar", asegura López.

A raíz de esta insalubre y sucia circunstancia, desde la asociación denuncian que haya tan pocos servicios disponibles en cruces "donde se concentran entre 200 y 300 personas", lo que provoca que muchos opten por orinar en medio de la calle. Además, desde la asociación aseguran que algunas de las cruces de la zona han inclumplido con el horario de música, que ha sonado "hasta las 02:30 o 03:00". 

Como claro ejemplo del "desastre", la organización de vecinos hace hincapié en incidentes como el protagonizado por dos jóvenes que se subieron a la emblemática fuente del Potro en la noche del pasado sábado y que, realmente, se trata de un acto que "ocurre cada fin de semana cuando los jóvenes salen de fiesta por los locales de la zona". "La diferencia es que esta vez lo grabaron en vídeo", tal y como recrimina el presidente.

"La situación se ha desmadrado, es insoportable y muchos se quieren ir de sus casas, lo que provoca que el Casco Histórico se vaya a quedar vacío. Una solución es que en las cruces no haya barras como se ha hecho toda la vida o que las barras ocupen el mismo espacio que la cruz, no algunas que tienen una cruz pequeña y luego carpas que ocupan toda la plaza", explica el presidente de la asociación vecinal.

De hecho, como añade López, en Semana Santa ya denunciaron el "descontrol" generado por esta fiesta tan querida también por los cordobeses. El problema se centra en, según explica el presidente, "que todos los pasos van por el mismo sitio y se concentran en las mismas calles como Cardenal González o la calle de San Fernando". Una problemática seria que "no deja a los vecinos de la zona ni salir de sus casas porque las calles están llenas de gente" impidiendo así la libre movilidad de quienes habitan en la zona.

La Asociación de Vecinos la Axerquía ya pidió en su momento al Ayuntamiento de Córdoba que se estudie una forma de "abrir el espacio" de las procesiones para no acumularlas en la misma zona. Con las Cruces de Mayo también prevén mandar una queja formal y tener una reunión para tratar de cara a las próximas fiestas que los vecinos del Casco Histórico de Córdoba puedan disfrutar de su barrio y de la tradición de la forma más sana.