More than ever | Festival de cine de Sevilla

La muerte como aceptación

Gaspard Ulliel y Vicky Krieps en una imagen del filme.

Gaspard Ulliel y Vicky Krieps en una imagen del filme.

More than ever viene marcada por ser el filme póstumo del malogrado Gaspard Ulliel, también por el protagonismo casi absoluto de Vicky Krieps (El hilo invisible, Abrázame fuerte), actriz en estado de gracia y candidata a todos los premios por su Sissi a contratiempo en La emperatriz rebelde, igualmente en este SEFF. Ella sola sostiene el mínimo andamiaje narrativo de un filme que despliega variaciones, fugas y matices sobre un solo tema: el derecho a morir como uno quiera, en soledad y lejos de toda consigna moral, no digamos ya religiosa o de manual de autoayuda.

Enferma de fibrosis pulmonar en su etapa terminal, nuestra protagonista rechaza la compasión de los otros y la protección del esposo (al que también entiende) y decide despedirse del mundo en ese paraíso idealizado de los Fiordos noruegos donde todos hemos soñado una retirada. Pero allí tampoco habrá sorpresas, revelaciones, ni giros inesperados: el filme de Atef sigue declinando lentamente, frente a las montañas nevadas y entre baños de agua helada, una decisión ya tomada contra toda compañía redentora o toda posibilidad de reinicio. A los postres algo dilatados sólo quedaba ya despegarse del calor y la piel del cuerpo del afecto.