María José García es limpiadora en un centro educativo. Cuando va a trabajar, dice que no puede evitar mirar al suelo y lamentarse porque “la suciedad nos está comiendo y no decimos nada”.

Opina que “el mantenimiento de la ciudad es pésimo”. Del mismo modo, añade que Córdoba es una ciudad muy poco accesible para las personas con discapacidad física o visual. “El problema no son las aceras estrechas, sino la cantidad de calles descuidadas”.

Explica que hay “agujeros en el suelo y losas levantadas con las que me tropiezo todos los días, sobre todo en Ciudad Jardín”. Aclara que en varias ocasiones “he tenido que ayudar a personas mayores por miedo a que tropiecen”. Pide al futuro gobierno local que implante medidas efectivas para el cuidado de la vía pública y un mayor control de la limpieza.

También cita la suciedad provocada por las heces animales. No sólo es por la “limpieza deficiente” que se hace fuera del Centro, es la falta de medidas preventivas. Cree que se debería llevar a cabo una campaña de concienciación para las familias con mascotas. Además, “se deberían instalar bolsitas en las papeleras para recoger las heces, como hacen otros ayuntamientos”, añade.