Economía

Estos son los casos en los que puedes pedir jornada reducida en el trabajo

Estos son los casos en los que puedes pedir jornada reducida en el trabajo

Estos son los casos en los que puedes pedir jornada reducida en el trabajo

En el mundo laboral, la conciliación entre la vida personal y profesional es un tema de gran importancia. La jornada reducida es una herramienta que permite a los trabajadores equilibrar estas dos esferas y disfrutar de un mayor tiempo para el cuidado de los hijos, estudios, atención a familiares o cualquier otro motivo personal. En este artículo, exploraremos los diferentes casos en los que se puede solicitar una jornada reducida según el Estatuto de los Trabajadores.

Según el artículo 37.5 del Estatuto de los Trabajadores, tanto los empleados como los empleadores tienen derecho a solicitar una reducción de jornada laboral. Además, en el artículo 47 se establecen casos específicos en los que la reducción puede ser solicitada por el empresario debido a causas económicas, técnicas, organizativas, de producción o fuerza mayor.

Uno de los casos más conocidos es el de la reducción de jornada por maternidad, paternidad y/o cuidado de hijos menores de 12 años. Tanto hombres como mujeres tienen derecho a reducir su jornada laboral proporcionalmente, con una disminución correspondiente en el salario. Además, en el caso de la lactancia, las trabajadoras tienen derecho a ausentarse una hora al día o dividir ese tiempo en dos medias horas. También se puede solicitar una reducción de jornada en casos de hospitalización de un hijo prematuro o para el cuidado de un hijo con enfermedad grave.

Otro caso relevante es el de la reducción de jornada por estudios. Aunque no existe una jornada reducida específica para este propósito, en los contratos de formación los trabajadores tienen derecho a asistir tanto al trabajo como a la formación. Además, aquellos que estudien cualquier tipo de formación tienen derecho a ausentarse para acudir a exámenes, elegir turno de trabajo o adaptar su jornada laboral, siempre y cuando no se trate de una jornada reducida propiamente dicha.

La reducción de jornada por cuidado de familiares o personas mayores también es un derecho para todos los trabajadores y trabajadoras. Se puede solicitar una reducción de jornada para cuidar de familiares hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad que no puedan valerse por sí mismos ni realicen una actividad remunerada. Esta reducción no tiene límite temporal y conlleva una disminución proporcional del salario.

Además, existe la posibilidad de solicitar una jornada reducida por guarda legal. Los trabajadores responsables del cuidado de menores de 12 años, personas con discapacidad física, psíquica o sensorial, o familiares hasta el segundo grado que no puedan valerse por sí mismos debido a su edad, accidente o enfermedad, pueden pedir una reducción de jornada. En el caso de menores de 18 años hospitalizados o en tratamiento de enfermedades graves, la reducción puede ser de hasta la mitad de la jornada laboral.

Es importante destacar que también se puede solicitar una reducción de jornada sin ningún motivo específico. Según el Estatuto de los Trabajadores, cualquier empleado por cuenta ajena tiene derecho a solicitar una reducción de jornada para conciliar su vida familiar y laboral, sin tener que justificar nada.

Es importante tener en cuenta que la reducción de jornada implica una disminución proporcional del salario y puede afectar otros aspectos de la relación laboral, como la cotización a la seguridad social o los beneficios laborales. Por lo tanto, es recomendable consultar el convenio colectivo aplicable y conocer los derechos y obligaciones específicos antes de solicitar una reducción de jornada.

En una reducción de las horas de trabajo, hay varios aspectos importantes a considerar. En primer lugar, el trabajador debe solicitarla por escrito con quince días de antelación y la empresa no puede negarse, ya que es un derecho. Además, es necesario establecer un horario acordado para la jornada reducida.

La duración de la reducción de horas dependerá del motivo que la justifica, como el cuidado de hijos, personas con discapacidad o familiares dependientes. El salario del empleado se verá reducido de forma proporcional a las horas trabajadas.

Es esencial tener en cuenta que la reducción de horas puede ocurrir en situaciones excepcionales como los ERE y ERTE, donde los empleados continúan trabajando con horarios reducidos y reciben el pago correspondiente por las horas trabajadas, mientras que el resto es cubierto por el SEPE.

En el caso de los despidos, los trabajadores con jornada reducida por cuidado de hijos tienen protección especial y solo pueden ser despedidos por causas legales, no relacionadas con su situación. Si el despido carece de causa legal, se considera nulo y el trabajador tiene derecho a ser readmitido en la empresa.

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